Víctimas de abusos en la Iglesia alzan la voz
El Vaticano organizó una reunión con obispos y religiosos de todo el mundo para hablar sobre “el monstruo” de la pedofilia. Reclamarán que la sede papal colabore con la Justicia civil en los casos de sacerdotes acusados de delitos sexuales y de sus encubridores.
CIUDAD DEL VATICANO.- Los miembros de la red internacional para el Fin de los Abusos Clericales (ECA, por sus siglas en inglés) llevarán hoy sus reclamos de “mayor colaboración de la Sede Vaticana con la Justicia civil” a un encuentro que tendrán con los organizadores de la cumbre anti-pedofilia que hará el Vaticano entre mañana y el domingo.
El italiano Francesco Zanardi, presidente de la red de víctimas locales y promotor de la causa contra el Instituto Próvolo en su país, confirmó que tendrán “un encuentro reservado con las autoridades del Vaticano”, en el marco de la cumbre a la que asistirán religiosos de todo el mundo.
Zanardi, miembro de la red ECA fundada por 18 asociaciones locales en junio de 2018, aseveró que la idea “es llevarle al Vaticano nuestro reclamo de mayor colaboración con la Justicia civil y penal en los casos de curas acusados de abuso”.
“No somos contrarios a los procesos canónicos, pero no son suficientes. Hace falta que intervenga la Justicia civil y penal”, pidió el abogado italiano.
El caso del Próvolo
En 2017, Zanardi denunció que la Iglesia local falsificó documentos para desligar de las denuncias sobre los abusos en el Próvolo al obispo de la ciudad.
Junto a Zanardi, estarán también el español Miguel Hurtado, quien denunció al monje de la abadía de Montserrat Andreu Soler, así como al chileno Juan Cruz, una de las víctimas durante su infancia del sacerdote Fernando Karadima.
La reunión de los repesentantes de las víctimas con la plana mayor de la comisión anti-pedofilia vaticana se celebrará hoy por la mañana y participarán los miembros elegidos por el Papa Francisco para organizar el encuentro: el arzobispo de Chicago (Estados Unidos), Blase J. Cupich; arzobispo de Bombay, cardenal Oswald Gracias; el recientemente nombrado secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el maltés Charles Scicluna, y el presidente del centro de Protección de Menores de la Universidad Pontificia Gregoriana y miembro de la Comisión para la Tutela de menores, Hans Zollner.
“Un lugar seguro”
El Vaticano se prepara desde hace semanas para enfrentar al monstruo de los abusos y de la pedofilia y lograr que la Iglesia “vuelva a ser un lugar seguro” luego de la cumbre anti-abusos, enfocada en la “responsabilidad, rendición de cuentas y transparencia”.
“Hace falta el esfuerzo de todos para mirar a este monstruo de los abusos a la cara si queremos derrotarlo”, pidió el lunes el vocero papal Alessandro Gisotti al presentar la cumbre, que contará con la presencia de presidentes y delegados de las conferencias episcopales del mundo para tratar la crisis de pedofilia en la Iglesia.
El Papa Francisco estará presente en los debates a lo largo de todo el encuentro y cerrará la cumbre con una misa el domingo 24, precisó su vocero.
La reunión contará con la presencia del titular de la Iglesia argentina, monseñor Oscar Ojea, entre los representantes del mundo.
Rendición de cuentas
La cumbre se realiza luego de la crisis durante 2018, a raíz de la acumulación de denuncias de pedofilia por parte de miembros del clero en Chile, Estados Unidos, Australia y otros países.
El arzobispo de Malta, Charles Scicluna, miembro del Dicasterio encargado de juzgar la pedofilia, la Congregación para la Doctrina de la Fe, resaltó los puntos centrales sobre los que se organizará el encuentro.
“El primer día será la responsabilidad, el segundo la accountability o rendición de cuentas y el tercero será la transparencia”, planteó Scicluna, experto fiscal vaticano sobre pedofilia.
“Son valores de un buen gobierno cuando se quiere prevenir y tutelar a los niños para que la Iglesia sea el lugar seguro que debe ser”, agregó Scicluna.
El ex vocero papal entre 2006 y 2016, Federico Lombardi, quien oficiará de moderador durante la actividad, confirmó además que el encuentro iniciará a las 9 de la mañana, con una oración y una “breve introducción” de Francisco.
Lombardi explicó que serán “190 los participantes en el aula”, incluidos 114 presidentes de conferencias episcopales y 12 religiosas. Ese primer día, los participantes verán un video con testimonios de víctimas de abuso antes de iniciar los trabajos en el Aula Nueva del Sínodo, parte del Aula Pablo VI, donde se desarrollarán los trabajos hasta el domingo, agregó Lombardi.
Al presentar la reunión a medios acreditados, Scicluna lamentó que en la Iglesia “la reacción primitiva” a los abusos fuera “de complicidad, un código de silencio”.
“Debemos alejarnos de eso, por eso el tercer día el encuentro se centrará en la transparencia. Debemos afrontar los hechos. No hay que rendirse en la protección de nuestros jóvenes y menores”, reclamó.
El comité organizador de la cumbre se reunirá antes del inicio de los trabajos con algunos grupos de víctimas que estarán presentes en Roma durante el encuentro, aunque esas reuniones no incluirán al pontífice.
“Hemos pedido a los participantes que escuchen a las víctimas antes de venir. Es muy importante que todos llevemos en el corazón el sufrimiento de las víctimas de abusos”, agregó a su turno el cardenal Cupich, arzobispo de Chicago y miembro del comité. (Télam-Reuters)
Monjas chilenas: sienten alivio por el reconocimiento papal
Tres ex monjas chilenas que denunciaron haber sido acosadas sexualmente hace dos décadas por sacerdotes elogiaron los comentarios del Papa Francisco, quien reconoció los abusos de clérigos. Las religiosas de la Congregación del Buen Samaritano en la ciudad de Molina, más de 200 kilómetros al sur de Santiago, dijeron que sacerdotes las manosearon. Muchos de los implicados han muerto. Yolanda Tondreaux, Eliana Macías y Marcela Quitral hablaron con su superiora, pero fueron acusadas de mentir o de provocar las situaciones de índole sexual. (Reuters)
Todo previsto: directivas sobre los sacerdotes con hijos
El Vaticano tiene directivas escritas sobre qué hacer cuando un cura rompe el celibato y tiene hijos, confirmó el vocero papal, Alessandro Gisotti. Relató al “New York Times” que el “documento interno” de 2017 sintetiza décadas de procedimientos con “la protección del niño como principio fundamental” y prevé que el padre deje el sacerdocio y asuma su responsabilidad de progenitor. “Es el próximo escándalo. Hay hijos por todos lados”, dijo Vincent Doyle, un psicoterapeuta irlandés que, a los 28 años, supo que era hijo de un cura, y creó un grupo de apoyo para personas en su misma situación. (Télam)