Un trabajo científico que nació en Tucumán recibió un importante premio durante la reunión de Key Opinion Liders (KOL), que se desarrolló recientemente en Panamá. El estudio, que se convirtió en un trabajo de alcance internacional, demostró que la ablación de un tipo específico de arritmia logra aumentar la sobrevida de pacientes que sufrieron infartos o que padecen enfermedades del corazón.
El autor del trabajo, el cardiólogo Luis Aguinaga, viajó a Panamá a presentar la investigación, que duró ocho años e incluyó pacientes muy graves.
En el estudio participaron más de 20 médicos de centros de España, Italia, Holanda y Alemania. Debido a su importancia, este avance será publicado en la revista Europace.
-¿Podría darnos más detalles sobre el estudio que realizaron?
- El trabajo tenía el objetivo de recuperar la función cardíaca en pacientes con deterioro severo y que además padecen arritmias (que originaron ó magnificaron ese deterioro). Con el tratamiento ablativo (eliminando esas arritmias) se obtuvo en la mayoría de los casos la mejoría de la función cardíaca.
- ¿Por qué es original?
- Porque es el primer trabajo científico de la literatura médica que demuestra una disminución de la mortalidad en un gran grupo de pacientes (300) que padecían insuficiencia cardíaca asociada a extrasistolia ventricular. Fueron seguidos por un largo período de tiempo: siete años. Todos los pacientes tenían la función cardíaca muy deteriorada y además padecían alta densidad de arritmias ventriculares. Se le realizó terapia de ablación de las arritmias, y en la gran mayoría se obtuvo una mejoría de la función cardíaca en el seguimiento. Para suprimir estas arritmias se ha utilizado radiofrecuencia (calor) y en algunos casos crioablación (frío).
- ¿Cuál es el impacto clínico de este trabajo que fue premiado?
- Es muy grande, porque aumenta el abanico de posibilidades terapéuticas en pacientes con enfermedad cardíacas severas y arritmias ventriculares, una patología que tiene una importante prevalencia en nuestro medio. El trabajo propone, además, que se realice un screening sistemático para la detección de estas arritmias en estos pacientes con enfermedad cardíaca severa.
Aguinaga destacó que la investigación tuvo como colaboradores en Tucumán a los doctores Alejandro Bravo y Alejandro Palazzo y se realizó en varias instituciones locales: el Centro Privado de Cardiología, Hemodinamia Parque y el Centro Integral de Arritmias Tucumán.’