Tanto si el resultado es a favor como adverso, conviene que un primer partido sea tomado con pinzas por el valor relativo que le cabe a toda jornada inicial de un torneo. Los músculos vienen más cargados de fierros que de rugby desde la pretemporada, y por lo general a un equipo le toma tiempo encontrar su mejor versión, su punto justo. Más aún en el caso de uno como Jaguares, que si bien mantiene la base, ha sufrido algunos cambios sustanciales (la llegada de un nuevo conductor, Gonzalo Quesada y la partida de Nicolás Sánchez, uno de sus emblemas) y completado una etapa de preparación carente de amistosos ante rivales que pudieran servir de parámetro.
Eso no quiere decir que se justifique la derrota 25-16 ante Lions, caída que por otro lado se encuadra en una curiosa fecha dominada por los visitantes: Bulls fue el único anfitrión que resultó vencedor. Volviendo a Jaguares, perder a manos de la franquicia de Johannesburgo no debería ser tampoco motivo de alarma desde que se trata del subcampeón de 2018, más allá de que ayer haya sido la primera vez en cuatro años que no se fueron derrotados de Vélez. Lo que deja un sabor amargo es que Lions no necesitó lucirse demasiado para llevarse la bolsa completa. Le bastó con un maul muy efectivo, que resultó inconjurable para el equipo argentino, y una defensa que tackleó mucho y tackleó bien, además de entorpecer la salida rápida de la pelota en los rucks. Y aunque fue el definidor de una tarea colectiva, vale destacar lo del ala Marnus Schoeman, autor de los tres tries sudafricanos.
Jaguares fue por momentos protagonista con el control de la pelota, pero cada ocasión de peligro generada le demandó un enorme desgaste y a la hora de la definición no estuvo fino. Quién no se agarró la cabeza en ese try que no fue y que pudo haber sido la llave para la remontada, cuando la pelota quedó suelta después de que el maul ya había entrado al ingoal.
Son aspectos a corregir, como el scrum, que sigue en el debe. No obstante, Santiago Medrano (autor del try argentino) y Mayco Vivas tuvieron una buena presentación. “Nos quedamos frustrados por no anotar lo que generamos. No me voy satisfecho, pero nos llevamos buena información de este partido”, aseguró Quesada.
El próximo sábado, la franquicia recibirá en Liniers justamente a Bulls, que le propinó una paliza memorable a Stormers (40-3).