Maximiliano Conca, el tucumano que sufrió un infarto durante sus vacaciones en Viña del Mar, fue trasladado anoche desde allí hasta Tucumán en un avión sanitario contratado por el Gobierno provincial luego de permanecer internado durante seis días en Chile.
Conca tuvo un paro estando de vacaciones en el país vecino y fue asistido allí en el hospital Naval, donde le realizaron los procedimientos para desobstruir la arteria. Fue dado de alta ayer al mediodía y se encuentra estable. Hoy está en la provincia, internado en la Unidad Coronaria del Centro de Salud, luego de haber sido controlado e ingresado en el programa para pacientes con infarto.
Estando en la Unidad Coronaria del hospital, Maximiliano habló con el Ministerio de Salud y dio las gracias a todas las personas que lo ayudaron en esta difícil situación. "Estoy seguro de que no tengo ni idea de cuántas personas pusieron su grano de arena para que esto se logre. Pero les agradezco a todos. Me podrían haber dejado en Chile, pero no. Me salvaron la vida”, enfatizó.
Además, Maximiliano comparó los servicios de salud de Chile con los de Argentina. “Crease o no, es la misma salud. Los profesionales de acá son tan buenos como los de allá. Al igual que los efectores. La enorme diferencia es que aquí es un derecho; es gratis. Es para todos. Y en Chile hay que pagar y a veces son cifras imposibles".
La hermana, Agustina Conca, contó detalles de cómo realizó la difusión de lo que le había pasado a Maximiliano. “En el momento que pasó este hecho desesperante y no teniendo soluciones a mano, ni siquiera hablando con el consulado, pusimos un Twitter y etiqueté a todos los que pude, incluyendo al Ministerio de Salud y al gobernador".
Por segunda vez, le salvaron la vida
El Centro de Salud ya conocía a este paciente. Hace tres años Maximiliano había entrado por un infarto sufrido mientras practicaba deporte. “Estaba jugando al fútbol y me agarró un infarto. Me trajeron aquí y me salvaron la vida aquella vez también. Después me enteré de que cuando yo estaba ingresando ese día, aquí ya estaba todo preparado para salvarme”, cerró Conca.