Martín Báez quedó detenido hoy con prisión preventiva por orden del Tribunal Oral Federal 2 de Buenos Aires en la causa en la que se lo investiga por lavado de dinero, como pedía la Fiscalia a raíz de información según la cual el mayor de los hijos varones del ya encarcelado empresario Lázaro Báez retiró dinero de cuentas bancarias en el extranjero a pesar de estar inhibido por la Justicia para hacerlo.
"Entendemos a esta altura que aquellas medidas cautelares oportunamente adoptadas no han sido suficientes, ello por cuanto a la fecha se han verificado nuevos hechos que denotan actos de entorpecimiento", sostuvieron los jueces del tribunal al dar lugar al pedido del fiscal Abel Córdoba.
En este sentido, el tribunal federal sostuvo que la libertad del hijo mayor de Báez puede poner en peligro "el recupero de los bienes que fueron el producto de los ilícitos que se encuentran involucrados en el juicio oral y público".
La información en la que se había basado el fiscal para pedir la detención de Martín Báez se originó en informes que la Unidad de Información Financiera (UIF) puso a disposición de la justicia en agosto de 2018, informaron fuentes judiciales.
El miércoles, Martín Báez se había ausentado en el reinicio de la actividad judicial del proceso por lavado de dinero que se le sigue a él, a sus tres hermanos y a su padre, entre otros, a pesar de estar notificado de que debía estar en Buenos Aires y no en Río Gallegos, donde se encontraba.
"Estaba en conocimiento que debió estar en la ciudad de Buenos Aires el día 1 de febrero o al menos requerir autorización al Tribunal para prorrogar aquella autorización conferida durante el mes de enero" para viajar a Santa Cruz, sostuvieron los jueces Néstor Costabel, Gabriela López Íñiguez y Adriana Palliotti.
El hijo mayor de Báez llegó hoy por a mañana a Buenos Aires y se presentó en el piso 6 de los tribunales federales de Comodoro Py a las 7.20, 40 minutos antes de que venciera el plazo que le había impuesto el tribunal.
En su pedido de prisión preventiva, el fiscal Córdoba había señalado que "la prueba documental incorporada permite reconstruir las decisiones recientes que tomó el acusado en el plano societario y financiero que permanece oculto", lo que daría cuenta de que los embargo e inhibiciones en su contra no impidieron que realizara maniobras que atentaron contra el proceso en curso.
El fiscal había relatado que la UIF detectó "la existencia de efectivo y valores por la suma de 3.050.918 euros en la cuenta Nro. 590201 del Banco CBH LTD de Bahamas y que la titularidad de la misma correspondería a la firma Eastern Shoreline Limited cuyos beneficiarios finales serían los acusados Martín Antonio, Luciana Sabrina, Leandro Antonio y Melina Soledad Báez y cuyos montos provendrían de la firma Kinski SA".
Con esa información, la Fiscalía "requirió el libramiento de exhorto internacional a la Mancomunidad de Bahamas al efecto de que se proceda al congelamiento de los fondos y se remita información y documentación respaldatoria de tal cuenta", según consta en el fallo de hoy.
El fiscal Córdoba remarcó además que se logró determinar que en las cuentas en el exterior llegó a haber 10.000.000 de dólares, pero que se fugaron US$ 5.500.000.
Por esos motivos, sostuvo que "las medidas procesales que se dirigían a asegurar la permanencia del acusado en la jurisdicción como modo de conjeturar cierto riesgo procesal, se evidencian laxas e insuficientes para evitar que atente contra el proceso penal y sus finalidades".
"El continuo y avezado manejo remoto de fondos en el exterior, instrumentado mediante sociedades y cuentas en constante transformación, con que Martín Antonio Báez ha continuado, no ha sido ni será evitado por la sola orden de que permanezca en determinado domicilio, por lo que se impone la necesidad de la implementación de la prisión preventiva", había reclamado el fiscal. (Télam)