Por Bruno Farano
07 Febrero 2019
El presente de San Martín no es fruto del azar. En 17 fechas que el equipo lleva jugando en la Superliga nunca pudo dejar atrás la zona de descenso y el margen de error se acorta de manera alarmante. Pero, claro, durante todo este tiempo, el equipo cambió nombres, dibujos y sistemas tácticos; pero hubo errores que se repitieron una y otra vez y que le impidieron al “Santo” sumar más puntos.
Lo positivo en medio de un panorama que cada vez aparece más sombrío, es que el equipo muestra una capacidad de reacción que no tenía durante el primer tercio del torneo. Pero eso no alcanza.
San Martín debe dejar de lado las falencias de una vez por todas. Para zafar del descenso debe hacer la simple y evitar experimentos que le puedan costar caro. No sólo debe sumar puntos, también debe recuperar la fortaleza en casa, evitar que le conviertan con tanta facilidad, sumar más seguido de visitante, ser protagonista desde el minuto cero y, sobre todas las cosas, hacer todo más simple: deben jugar los futbolistas que mejor estén y en los puestos donde mejor rinden. Así, la meta estará más cerca de concretarse.
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