Si su paso por Atlético y Tucumán se resumiera al último semestre de 2018, Tomás Rojas quizás hablaría de todo menos de fútbol. No fue el cierre de calendario ideal para el paraguayo. Jugó casi nada y cuando lo hizo, generalmente, fue en Reserva. Pero todo cambia. “Rojitas” podría dar fe, al menos por sus buenas presentaciones en los únicos dos amistosos de pretemporada que jugó el “Decano” en 2019, contra Cerro Porteño, su ex club, y contra Mitre de Santiago. En ambos casos, el nacido en Lambaré dejó gratos recuerdos. Y goles, que son amores.
“La pretemporada que hice me ayudó bastante, y con la ayuda de mis compañeros estoy tomando confianza; se me agrandó el arco, como se dice”, le comenta a LG Deportiva el volante ofensivo, de perfil diestro que el sábado le marcó por triplicado al segundo equipo de los santiagueños. Y el miércoles pasado, en Asunción, le sirvió el 1-3 a Javier Toledo. Todo suma.
Si Ricardo Zielinski temía por los goles que Atlético sacrificaba ante la partida de Guillermo Acosta a Lanús, Rojas puede hacerle cambiar de opinión. “Me pide que tome la pelota, que tenga confianza y que no decaiga si erro un pase. Que pruebe mucho al arco”. Está claro que el “Ruso” lo tiene en cuenta. Aunque suene extraño decirlo, Rojas puede tomarse casi como un refuerzo. Pasó de la nada misma a hacer barullo en este tramo del verano previo al reinicio de la Superliga. “Vengo trabajando muy bien, pero (si juega o no) eso queda a criterio del técnico. Él es el que decide quién va al banco y quién juega”, se aparta de las opiniones personales Rojas.
Surgido en Sol de América, donde debutó en 2015, Tomás se pasó la mayor parte de su vida persiguiendo una pelota de fútbol. A los siete se unió a Afemec, después pasó a Las Águilas, donde estuvo desde los ocho hasta los 13, y por último Sol de América. Y de allí a cumplir su primer sueño: triunfar en el fútbol. ¿Cómo llega a Atlético? Por recomendación de Toledo, que había sido compañero de Tomás, precisamente en Sol de América, que mantiene una gran relación con Atlético, tras la compra del pase del delantero.
“Mi objetivo para este año es poder ganar minutos y afianzarme en el equipo”, con eso se ilusiona “Rojitas”. Va por el buen camino. Resulta que tanto él como Tomás Cuello, la joven figura del “Decano”, ambos sumaron puntos de lo lindo en la percepción del entrenador, para empezar el torneo como titulares. O al menos esperando su chance entre los suplentes.
Rojas es todo lo vertical que un extremo exige. “Tengo varios goles en mi anterior club, soy un volante con mucha llegada”, avisa a quienes todavía no lo conocen.