Entre críticas, se prorrogó el envío de dinero a la SAT

La Provincia seguirá enviando en 2019 aportes no reintegrables a la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT), la empresa de participación estatal mayoritaria encargada de los servicios de agua y de cloacas.

La discusión del proyecto, que había sido enviado por el gobernador Juan Manzur, motivó acusaciones cruzadas entre oficialistas y opositores. Mientras los primeros cargaron contra la gestión del intendente, Germán Alfaro (PJS, Cambiemos), los segundos reclamaron contra el mandatario provincial por la falta de difusión de las cifras con respecto a la SAT.

En 2018, gracias a una excepción a la Ley de Administración Financiera, el Ejecutivo quedó habilitado a girar fondos para el financiamiento de la Sociedad Aguas del Tucumán. Según los decretos publicados en el Boletín Oficial, los envíos por este concepto superaron los $ 170 millones. Como este permiso caduca el 31 de diciembre próximo, fue renovado por un año más en la sesión del viernes.

“El agua y las cloacas son elementos de primera necesidad, con impacto en la vida de las personas”, planteó el presidente de la comisión de Hacienda, Juan Ruiz Olivares, al defender la propuesta.

El radical José Canelada (Cambiemos) señaló que el reemplazo del actual titular de la SAT, Fernando Baratelli, en lugar de su antecesor, Alfredo Calvo, no trajo una mejora en la empresa. Y aseveró que ni la SAT ni el PE respondieron los diversos pedidos de información girados desde la UCR: “No tenemos cómo conocer el plan de inversiones que menciona el proyecto (del PE)”, señaló el opositor.

Alfredo Toscano (PJS, Cambiemos) aseveró que las cifras “están”, pero se las mantiene ocultas. “El Estado tiene participación en esta empresa. Y el gobernador Manzur oculta a los 49 legislador la información financiera; sabemos que el servicio es malo, pero no tenemos más certezas que esa”, indicó el dirigente alfarista. Claudio Viña (Nueva Fuerza, Cambiemos) reclamó la presencia en el recinto de Baratelli. “Que informe sobre los planes de obra”, exclamó.

Eduardo Cobos, afín a la Casa de Gobierno, culpó al municipio. “El problema del colapso estructural es la cantidad de edificios que se construyeron en la capital”, indicó. El jefe del bloque del PJ, Ramón Santiago Cano, se sumó a esas críticas. “Es bueno poder recaudar, pero cuando se construye para arriba, hay que fijarse qué hay para abajo”, graficó el oficialista.