El intendente de la capital, Germán Alfaro, fue el destinatario de las críticas este mediodía en la plaza Independencia. Allí, el gobernador, Juan Manzur; y el vicegobernador, Osvaldo Jaldo, presentaron las nuevas maquinarias que adquirió la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT).
En medio de las quejas opositores y de los reclamos de los vecinos por las falencias en la prestación del servicio de agua potable y de cloacas, el Gobierno brindó un respaldo contundente a la gestión de Fernando Baratelli al frente de la SAT.
"Acá en la capital no nos han ayudado, y el intendente lo único que hacía era demandar. Hay muchos intendentes que nos ayudaron y nos dieron una mano. El de la capital no nos ayudó; veremos de hacer desde el Gobierno lo que falta", planteó el mandatario en rueda de prensa.
Alfaro, de la coalición macrista Cambiemos, mantiene desde el año pasado en alto sus reproches hacia la gestión de la SAT. Incluso, presentó un proyecto con la adhesión de 100.000 firmas para pedir la intervención de la empresa.
Manzur, además, negó que la SAT sea una "caja negra", como denunciaron legisladores de la oposición. "Acá está la plata, en las camionetas, en los camiones que se compraron, en las retroexcavadoras. No se les puede faltar el respeto así a los trabajadores. No se puede decir cualquier cosa", consideró el titular del Poder Ejecutivo.
Jaldo también le pegó al jefe municipal capitalino, aunque sin mencionarlo directamente. "Esto demuestra que el Gobierno escucha a la gente, y que cuando hay un problema ve la manera de solucionarlo. Vemos con preocupación que sectores de la oposición cuando recorren es para descubrir una falla pero no para buscar una solución, sino sólo para hacer un spot publicitario", ironizó.
El ajuste nacional
Manzur y Jaldo, además, le apuntaron a la Nación por la quita de los subsidios que permitían mantener la tarifa social en las boletas de la energía eléctrica. En el caso de Tucumán, unas 160.000 familias se verán afectadas desde enero con aumentos tarifarios.
"Todos los días el Gobierno nacional quita más plata a la gente", señaló el gobernador. Confirmó que se evalúa desde el punto de vista presupuestario si la Provincia puede asumir parte de los $ 500 millones que dejará de aportar la Nación durante 2019. La idea es implementar una tarifa social local.
El presidente de la Cámara, en tanto, les reclamó a los referentes locales de Cambiemos que intercedan ante la Nación. "El ajuste del Gobierno nacional en la tarifa social le quitó a la gente unos $ 500 millones. Para que dimensionen aún más, se perjudica a más de 160.000 familias tucumanas. Que critiquen menos y gestionen más los de Cambiemos, que le recomienden al Presidente que deje de hacer ajustes", arremetió Jaldo.