CIUDAD DE GUATEMALA.- Unas 50 comunidades guatemaltecas continúan en alerta alrededor del Volcán de Fuego, a seis meses de la erupción que arrasó aldeas y dejó al menos 194 muertos y cientos de desaparecidos, por lo que la zona fue declarada área de riesgo.
Ante esa situación, se dispuso un plan para evacuar a los afectados si se presentara una erupción como la ocurrida el 3 de junio pasado, informó Walter Monroy, subsecretario de Gestión de Riesgo de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres y director de los Procesos de Recuperación.
Cerca de 8.000 familias, que suman entre 45.000 y 50.000 personas, viven en comunidades alrededor del volcán, de 3.763 metros de altura, señaló Monroy.
Pulsos de incandescencia
“Seguimos teniendo problemas. Esta semana volvieron a bajar lahares que se desprenden del cono, especialmente por las explosiones, los flujos de lava y las lluvias. La zona sigue siendo área de riesgo”, explicó.
Las explosiones, entre moderadas y fuertes, que duraron toda la semana con una frecuencia de entre 10 y 12 por hora, generaron “pulsos de incandescencia a 200 metros de altura, con avalanchas moderadas y fuertes en el contorno del cráter”, indican boletines del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh).
Durante el fin de semana la actividad cedió y las explosiones, de “débiles a moderadas”, bajaron a entre tres y cuatro por hora. La recurrente actividad volcánica, indicó Monroy, altera el trabajo para recuperar el área devastada.
El 18 de noviembre el Volcán de Fuego registró la quinta erupción en este año y obligó a la evacuación de más de 4.000 moradores de comunidades cercanas. (Télam)