En días en que hasta noviembre ya está cansado, Atlético comienza a dejar un 2018 en el que, detrás de River, Boca e Independiente, fue el cuarto equipo que más partidos jugó en el año, con 40 presentaciones (12 de la actual Superliga, 15 de la temporada anterior, 3 de la Copa Argentina y 10 de la Libertadores). Aunque disminuyó bastante respecto del maratónico 2017 (habían sido ¡48! partidos en el año), semejante esfuerzo igual debería ser un buen motivo para adelantar las fiestas sino fuera que, además de defender el segundo puesto en la Superliga, los últimos tres capítulos del año no serán nada decorativos para “el decano”.
El viernes, a las 19, Atlético jugará en Córdoba contra Belgrano un partido que a comienzos de la temporada sonaba a la final del mundo por los promedios; el sábado 1º de diciembre, a las 21.30, no hace falta decir que San Martín visitará el Monumental; y el domingo 9, a las 19.20, enfrentará a Boca en una Bombonera que recibirá por primera vez a su equipo después de la definición de la Copa Libertadores contra River (o sea, el equipo de Guillermo Barros Schelotto estará de fiesta, y preparándose para el Mundial de Clubes en Emiratos Árabes Unidos, o despedirá el año de duelo).
En la zona mixta del Nuevo Gasómetro, el domingo pasado, cuando muchos periodistas porteños se olvidaron por algunas horas de los River-Boca de la Copa y parecieron descubrir que Atlético ocupa los puestos más altos de la Superliga, ocurrió un hecho que define a este equipo: la prensa comenzó a preguntarle a los jugadores de Atlético por el clásico contra San Martín y los futbolistas respondieron con el partido ante Belgrano. Atlético va por el torneo con las manos en el bolsillo, silbando bajito, haciéndose el distraído.
Apenas Rodrigo Aliendro aceptó dejar un par de conceptos mínimos respecto al partido con San Martín: “Los hinchas y los familiares ya nos hacen saber del clásico y es entendible. Todos conocen que los hinchas en Tucumán son muy fanáticos, así que habrá que estar a la altura”. Al bonaerense además le preguntaron si siguió por televisión los últimos partidos de San Martín, y cómo imagina el eventual duelo con Adrián Arregui, y agregó: “En los tiempos libres trato de mirar todo, y también a San Martín. (Arregui) es bastante duro y se pondrá todo, como siempre”.
Pero en sintonía con la mesura habitual de Ricardo Zielinski, los jugadores primero pusieron el foco en Belgrano. “No, por ahora nada de San Martín. Primero está Belgrano”, corrigió Juan Mercier a un cronista. “Sabemos que es importante para la gente pero primero está el partido del viernes”, coincidió, a su lado, José San Román, el autor del golazo que selló la victoria ante el “Ciclón”. Aunque hablar de partidos decisivos a esta altura de la temporada sería una falacia, la visita a Córdoba será importante por lo deportiva pero también por lo simbólica por lo que significa la lucha por no descender.
El siguiente partido contra San Martín debería ser importante por la misma razón pero todos saben que lo que estará en juego será el honor del primer clásico en Primera en casi 40 años.
Aún así, para todo Atlético, primero está Belgrano.