20 Noviembre 2018
CONTUNDENTE. La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió terminar con las categorías que dividen, como las “de derecha” y “de izquierda”. reuters ARCHIVO
La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner cuestionó ayer las políticas llevadas adelante por el presidente Mauricio Macri, y aseguró que si bien es un gobierno “legal” porque fue votado por la gente, “sus políticas no tienen legitimidad porque no fueron convalidadas por nadie”. Así lo señaló al exponer en el Primer Foro Mundial por el Pensamiento Crítico, presentada como una “contracumbre” de la que hará el G20 a fin de mes en Buenos Aires.
“Nadie puede discutir que tenemos un gobierno legal, pero no hay legitimidad en políticas que no fueron convalidadas por nadie”, sentenció la senadora, al tiempo que señaló: “lo que se prometió en campaña luego no se cumplió”.
Durante su exposición, que duró casi una hora y media, la senadora también envió otro mensaje al Gobierno al afirmar que “la calle sigue siendo el escenario de la política y de las grandes transformaciones del país”, y “no las redes”.
Desde el escenario del microestadio de Ferrocarril Oeste, donde se desarrolla el foro organizado por el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso) que concluirá hoy, Cristina Fernández habló del neoliberalismo, categoría que le atribuyó al actual gobierno.
En ese tono, pidió terminar con las categorías que “dividen”, como las “de derecha” y “de izquierda”, y empezar a pensar en un frente social, cívico y patriótico que agrupe sectores que son agredidos por las políticas del neoliberalismo. “En la Argentina, en 2015, no hubo una explicación de neoliberalismo en la campaña, a nadie se le dijo que iba a perder sus derechos, se les prometió reducir el impuesto a las Ganancias, pero no que se iban a eliminar por ejemplo las conquistas del PAMI”, dijo.
En este sentido, agregó que el neoliberalismo, en tres años y medio de gobierno, “ha vuelto a endeudar al país” y juzgó: “hoy la Argentina vuelve a tener el cepo estructural que tuvo durante décadas, gracias a ese endeudamiento. No hace falta ponerse a discutir de porcentajes de pobreza cuando se ve la cantidad de familias que hay durmiendo en las calles”, cuestionó.
Del foro también participan el ex mandatario uruguayo José Mujica, el ex candidato presidencial del PT de Brasil Fernando Haddad, y el vicepresidente de Bolivia, Alvaro García Linera, entre otros.
Los que no faltaron
Las primeras filas para escuchar a Cristina las ocuparon dirigentes políticos y sindicales ligados al Kirchnerismo. Entre ellos, el jefe de la bancada del FpV en Diputados, Agustín Rossi; sus pares Leopoldo Moreau, Juan Cabandié y Mayra Mendoza (que trajo un cartel para pedir la liberación del ex vice presidente Amado Boudou); el líder de Nuevo Encuentro, Martín Sabbatella; el ex compañero de fórmula de Cristina, Jorge Taiana; los intendentes Verónica Magario (La Matanza) y Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas). También, el diputado Fernando Espinoza.
“Lula libre” y “unidad de los trabajadores” fueron los cánticos repetidos entre la multitud que agitó el programa del evento como abanico. Si bien no hubo banderas de agrupaciones políticas, abundaron remeras con imágenes de Cristina y Néstor Kirchner.
Durante un discurso de una hora y dos minutos, la ex mandataria recordó que terminó su gestión “con una Plaza de Mayo colmada, desbordada, como nunca se había visto en la historia, algo inédito” y dijo que eso fue a pesar del “bombardeo mediático de 12 años y medio”.
Al hablar de inflación, la ex presidenta comparó los datos del último año de su Gobierno con el actual, tomando como índice el que brinda la Ciudad de Buenos Aires. “
En los 10 primeros meses de 2015, fue del 19,8%. Tres años después, es del 38,2%. Duplicó la inflación el Gobierno que proclamaba que iba a ser el problema más fácil de resolver”, culminó. (Télam)
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