La cúpula del peronismo tucumano, encabezada por el gobernador Juan Manzur y su vice Osvaldo Jaldo, desembarcó el jueves en Concepción para consolidarse en el sur provincial. Lo hizo invitada por el intendente local Roberto Sánchez, de coalición Cambiemos, para participar de la inauguración de obras de hábitat en el barrio Pervinaz de esa ciudad. La sorpresa fue que ningún dirigente provincial del macrismo acompañó al intendente en los actos públicos.
Manzur y Jaldo, que buscarán la reelección en 2019, dejaron atrás las tensas relaciones que mantenían con Sánchez y que tenían su eco en el Concejo Deliberante. Fue en el cuerpo donde los ediles opositores y oficialistas acordaron transitar en armonía el último período de mandato.
En ese marco Cambiemos logró imponer como vicepresidente segundo a un hombre de su bancada: se trata de Ramiro Beti. Se trató de la primera señal de conciliación que lanzó el oficialismo tucumano hacia la intendencia local. ¿El objetivo? Seducir el patrimonio de electores del radical que, por ahora, está huérfano de representantes provincial. Esa fue la lectura que hizo entre líneas el diputado nacional José Orellana, también presente en el acto.
Sánchez desde hace tiempo venía denunciando que la Provincia ejercía un trato discriminatorio contra su administración. “Recibimos menos plata que municipios con mucho menos habitantes que el nuestro”, planteó en varias ocasiones Sánchez, disgustado con la provincia. La trama parece haber quedado en el olvido. Manzur y Jaldo estuvieron varias horas en Concepción participando de otras actividades partidarias en distintos barrios de la ciudad.
Los discursos que pronunciaron durante el acto tanto el intendente, como el gobernador y vice, fueron de tono amistoso y cargados de elogios. “En estos momentos en que las variables económicas no están saliendo como tendrían que salir, valoramos mucho el esfuerzo de este intendente que con recursos propios, que son contribuciones de los vecinos, y con los aportes mensuales de la provincia, ha podido mantener la paz social pagando los sueldos e incluso con los incrementos de la cláusula gatillo”, expresó Jaldo.
Manzur, por su parte, agradeció la gentileza que tuvo Sánchez de invitarlo a la inauguración de obras y destacó que su gestión, más allá de las banderías políticas. Solicitó que se busque “coordinar esfuerzos y trabajar en forma conjunta para brindar respuesta a los vecinos”.
“Esta es una obra fantástica que se hizo en esta Perla del Sur. Y esto tiene que ver con la calidad de vida de la gente. Por eso estamos aquí. Y cada vez que nos diga que hay que venir a inaugurar una obra, vamos a venir a estar a la par del intendente”, sostuvo el primer mandatario.
Las obras habilitadas consisten en seis manzanas adoquinadas, alumbrado público con lámparas Led, veredas y arbolado.
“Con la provincia estamos trabajando en conjunto. Pues aquí viven 75.000 tucumanos y como tal merecen el mismo trato que los demás de otros municipios. El gobernador dijo que gobierna para todo los tucumanos. De ahí que agradezco el apoyo que nos brinda en éste desafío permanente de mejorar la ciudad”, celebró Sánchez.
El intendente lanzó en las últimas semanas un intenso programa de inauguración de obras. En el barrio El Municipal habilitó la ampliación de la red de gas natural que beneficia a 1.050 familias. En el barrio Yrigoyen hizo lo propio con la remodelación de una plazoleta. A la vez puso en servicio móviles para la Guardia Urbana y un camión recolector de residuos.