“En ningún momento lo he llevado al camión de prepo. Lo he sacado porque, si lo dejaba, capaz que después no encontraba nada; ¿cómo puedo dejar un vehículo ahí?”. Con esas palabras se defendió Daniel Roldán, el dueño del Ford Cargo 1722 que el pasado 20 de septiembre terminó en el fondo del Canal Sur. El propietario del rodado, que iba cargado con áridos cuando se desplomó el puente de avenida Colón y diagonal Lidoro Quinteros, refutó que el siniestro haya ocurrido por un impacto, como concluyeron peritos contratados por la constructora Falivene SRL. Además, cuestionó el diseño del cruce, proyecto que estuvo a cargo de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV).
El ingeniero Juan Carlos Falivene había puesto en duda que el vehículo que conducía el camionero Franco Rodríguez no haya quedado secuestrado. Roldán, que es policía y presta servicios en la comisaría de El Mojón, aseguró que ni personal de la DPV, ni la Justicia ni la Policía le impidieron retirar el rodado horas después del siniestro. Indicó que contrató dos grúas con la ayuda de un amigo. “Por más que yo sea policía no voy a pasar por encima de nadie; nadie me dijo nada”, insistió a LA GACETA.
Roldán se manifestó disgustado por los dichos del empresario y le quitó credibilidad al informe en el que se adjudica el siniestro a una colisión del vehículo contra la estructura. “Iba pasando y se ha desplomado el puente; acá no hay nada raro. El eje está deformado porque cayó de 12 metros de altura. Encima lo que dice él, que agarró una gran velocidad y ha derrapado... Hay una avenida donde el camión sí o sí tiene que parar y subir despacio. Este hombre está diciendo cosas que no corresponden, pero cada uno se trata de defender a su manera”, argumentó.
El policía dijo que desde 2008 tiene -junto a su hermano- la empresa de cargas Transporte Víctor Roldán. Señaló que el Ford Cargo trasladaba unas 27 toneladas en el momento que se produjo el siniestro. Además, cuestionó el estilo del cruce, con vigas de hormigón y péndolas que sostienen la calzada. “Para mí el diseño no es el mejor, si es que no ha aguantado. Es un puente que supuestamente está hecho para (soportar) 90.000 kilos y (el camión) no ha pasado ni con la mitad. No se puede desplomar eso. Para mí está mal hecho, y el de la par también”, lanzó.
Según Roldán, se siente dañado por el informe que presentó Falivene y espera que las pericias que realizan ingenieros de la UNT aporten claridad al respecto. “Me están perjudicando a mí y al chofer, porque están diciendo cosas que no son. Nunca puede pasar eso que ellos dicen. Y por el choque a una pared, no se puede caer el puente tampoco. Porque si vamos a eso, no quedaría un puente en Tucumán. Las veces que camiones quedaron colgando (de los puentes) y nunca se ha caído (ninguno). Supongamos que lo ha tocado, ¿se puede caer un puente?”, se preguntó. Los resultados de las pericias podrían estar para diciembre.
Comenzaron a retirar los escombros
La Dirección Provincial de Vialidad (DPV) informó que ayer comenzaron los trabajos de remoción de los escombros (foto superior) del puente que se derrumbó el pasado 20 de septiembre, en avenida Colón y Canal Sur. El ingeniero Marcelo Nazur explicó que las tareas se realizarán en dos etapas: primero se fraccionará el tablero de hormigón que está dentro del canal y luego se retirarán los escombros para la libre circulación del agua. Las labores podrían extenderse hasta dos semanas. El jefe de la División Estudios y Proyectos de la DPV, Antonio Martín, remarcó que tomarán las medidas necesarias en el segundo puente (ubicado a 50 metros) cuando obtengan los resultados de los estudios solicitados a la UNT.
Declaración: una presentación ante la fiscalía de turno
El secretario de Relaciones Institucionales de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, José Luis Avignone, afirmó que luego del siniestro con el puente realizó una presentación ante la Fiscalía de turno para deslindar responsabilidades. Al respecto, solicitó a la Justicia que sume a la investigación el informe conformado por dos peritos contratados por el ingeniero Juan Carlos Falivene. En él se asegura que los diseños, realizados por la Dirección Provincial de Vialidad, fueron objetados por un especialista que verificó el cálculo del proyecto original. “Estamos en presencia de una negligencia grave que pudo haber derivado en una tragedia de imprevisibles consecuencias”, manifestó Avignone.