Las claves de "Bohemian Rhapsody", la canción que cambió la historia
“Bohemian Rhapsody”, la película que celebra la vida y la música de Freddie Mercury, superó todas las expectativas durante el primer fin de semana de exhibición. Sólo en Estados Unidos recaudó más de 50 millones de dólares, cifra impensada tratándose de una biopic musical. En Tucumán la respuesta es notable y con un dato que llama la atención: los cines se poblaron con público de todas las edades, lo que reafirma la vigencia de Queen y de sus clásicos.
Que el título de la película sea el de la canción más famosa de la banda no es casual. Es más; un largo pasaje de la trama está dedicado al proceso de grabación del tema, desde los primeros ramalazos de inspiración que le brotaron a Freddie (tocando la intro en el teclado que tenía sobre el espaldar de la cama) hasta su edición, como single y como parte del disco “A night at the Opera”. “Bohemian Rhapsody” narra las discusiones de la banda en la oficina de producción del sello EMI, ya que se negaban a publicar un corte de seis minutos cuando los hits radiales rara vez pasaban de los 240 segundos. Y también las sesiones en el estudio, en especiallos esfuerzos del baterista Roger Taylor por alcanzar las notas más altas para la sección operística de la suite.
El resto es historia. “Bohemian Rhapsody” enamoró de tal modo que se convirtió en el tercer single más vendido de la historia del pop-rock, detrás de "Something about the way you look tonight" / "Candle in the wind 1997" (de Elton John) y de "Do they know It's Christmas?" (del colectivo Band Aid). Y con la salvedad de que “Bohemian Rhapsody” llegó dos veces a la cima del chart, cuando salió por primera vez en 1975 y tras la muerte de Mercury, en 1991. Pero más allá de los números y de la impresionante cantidad de premios y distinciones que la canción fue reuniendo con el paso de las décadas, lo central es su contribución a la cultura popular de la segunda mitad del siglo XX. El tema trascendió largamente lo musical y se instaló como símbolo de una época.
El estreno de la película generó un revival que incluye la música de Queen, la figura de Freddie Mercury y, de paso, la disección de “Bohemian Rhapsody” para demostrar que es mucho más que una canción. Algunos tips sirven como ejemplo:
- Las piezas conceptuales nutridas por la música clásica habían generado años antes el rock sinfónico. Pero nunca se había experimentado en una misma canción semejante mixtura de géneros. “Bohemian Rhapsody” combina una introducción cantada a capella, una balada clásica al piano, dos secciones rockeras (una incluyendo el imprescindible solo de guitarra), la sección operística y un cierre que recupera el hilo melódico de la balada. Un pastiche muchas veces imitado, incluso por el propio Queen en “Innuendo”, pero jamás repetido.
- Las interpretaciones de la letra son innumerables y el propio Mercury contribuyó absteniéndose de dar precisiones. La historia del chico que le vende su alma al diablo y lo confiesa en un crescendo dramático hablándole a su madre se nutre de infinidad de entrelíneas. La mayor influencia literaria es el “Fausto” de Johann Wolfgang von Goethe, mientras que para la construcción de los versos Mercury apeló a toda clase de fuentes, desde la aparición de distintos personajes y figuras como scaramouche, fandango, Galileo Galilei, Figaro, Belcebú y Bismillah (un alocución árabe que significa “en el nombre de Alá”) hasta citas textuales del Antiguo Testamento: “thunderbolt and lightning very very frightening me (del libro de Job).
- Hasta que salió a la luz la obra de Queen, la más famosa de las rapsodias del siglo XX era la “Rhapsody in Blue”, de George Gershwin, obra maestra del jazz que respetaba a rajatabla el concepto del género: una pieza musical que varía –sin interrupciones- la concepción de armonía, melodía y ritmo. ¿Las principales diferencias? La composición de Gershwin es mucho más extensa (casi 17 minutos) pero es sólo instrumental; la de Queen agrega una letra. En cuanto a lo de “Bohemia”, suele relacionarse con la región de Europa Central en la que Fausto y el Diablo sellan el pacto.
- En una serie de tuits publicados por Jorge Palazon se consignan algunos elementos tan interesantes como llamativos. 1) La película se estrenó el 31 de octubre de 2018 y “Bohemian Rhapsody” se escuchó por primera vez como single el 31 de octubre de 1975. 2) Palazon apunta que Bismillah es la primera palabra que aparece en el Corán. 3) El tema dura 5’55” y se relaciona con la afición de Mercury por la astrología: el 555 está relacionado con un cambio espiritual relacionado con Dios y propone el inicio de una nueva etapa. 4) La canción se publicó la víspera del Día de Todos los Santos, fecha que en distintas religiones habla de la trascendencia y de la vida espiritual. En el caso de los celtas se llama “Samhain” y celebra la “transición y apertura al otro mundo”.
- Con el corto de “Bohemian Rhapsody”, Queen demostró que los videos representaban el futuro del pop-rock. Siete años más tarde nacía la MTV.