Mientras los empresarios de colectivos no cejan en sus reclamos por la crisis económica y la eliminación de los subsidios nacionales, el Gobierno provincial ratificó que no tiene los recursos para suplir el cese de estos fondos.
“Todos los recursos que se puedan incrementar (de Coparticipación federal) tienen un destino específico en el Presupuesto provincial de 2019, por lo que nos vemos imposibilitados de aportar los $ 2.000 millones anuales en subsidios”, sentó posición el vicegobernador Osvaldo Jaldo.
Tras el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la gestión del presidente Mauricio Macri anunció que, entre los ajustes solicitados por la entidad internacional, eliminarán los subsidios al sector. Habían anunciado que la cartera de casi $ 100.000 millones pasaría por cuenta de cada distrito, transfiriendo los subsidios. Del total del fondos, alrededor de $ 23.000 millones son distribuidos para las empresas de colectivos de las 23 provincias del país. Los cerca de $ 77.000 millones restantes se distribuyen para subsidiar el transporte público de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano (que abarca 41 intendencias), para colectivos, subte y tren. Se acordó durante el debate en Diputados crear un Fondo de Compensación para 2019, que rondaría los $ 6.000 millones, y su reparto estará atado a la decisión del ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich.
Cuando el Presupuesto 2019 recibió media sanción en el Congreso, el diputado José Cano había defendido la medida: “No es que el Gobierno nacional les tiró la responsabilidad a las provincias y no dio fondos. Cuando el gobernador firmó la addenda del consenso fiscal ahí se establecieron los recursos que se destinarían a tal efecto. El transporte no costará $ 40, salvo que la Provincia quiera usar esos fondos para otra cosa”, había asegurado el radical. En Tucumán, los subsidios al transporte rondan los $ 200 millones mensuales ($2.400 millones anuales).
“Es una decisión discriminatoria que ha tomado el Gobierno nacional, la de quitar el subsidio para el transporte público de pasajeros a algunas provincias del país, no así a todas, como Capital Federal y el conurbano en la provincia de Buenos Aires”, cuestionó Jaldo, -a cargo del Poder Ejecutivo por la gira oficial del gobernador Juan Manzur en el extranjero-. “La Provincia no tiene ninguna posibilidad de reemplazar esos recursos que quitó la Nación”, enfatizó.
Los empresarios de colectivos insisten en que la crisis económica pone en riesgo el pago de sueldos de este mes. “A la crisis económica de las empresas por la inflación y el descontrol del dólar -que eleva el valor de los insumos-, se suma la quita de subsidios. Todos los países del mundo subsidian al transporte como política de conectividad y para reducción de contaminación. Es una compensación tarifaria”, explicó el vicepresidente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), Jorge Berreta. Y agregó: “si los subsidios nacionales se eliminan y no hay fondos provinciales, el boleto llegará a un valor técnico de $ 40 y se precarizará el servicio. Será peor que en 2001, porque está agotada nuestra capacidad de endeudamiento”, finalizó Berreta.
Jaldo consideró que, sin subsidios, la tarifa aumentará. “No sé si subirá hasta $ 40, pero será un incremento sustancial porque faltarán más de $ 2.000 millones al sistema. La gente no lo podrá pagar”, advirtió el vicegobernador. Y agregó: “el Fondo de Compensación del Ministerio de Transporte será para asistir exclusivamente a grandes municipios, priorizando a las intendencias de Cambiemos”.