Sheila Alejandra Ayala, la niña de 10 años que era buscada desde el domingo y ayer fue encontrada asesinada en la localidad bonaerense de San Miguel, murió estrangulada con una sábana y la data de muerte es de tres a cinco días, según un primer informe forense que deberá ser ratificado por la autopsia que se realizará esta tarde, informaron fuentes policiales.
Según los voceros, el médico de la Superintendencia de Policía Científica que trabajó en la recolección del cadáver informó a los investigadores que Sheila presentaba en el cuello un surco de ahorcadura compatible con un estrangulamiento con una sábana color blanca con dibujos infantiles.
Los peritos reportaron también que al abrir la bolsa de basura que contenía el cuerpo, encontraron a la nena desnuda y sus prendas de vestir sueltas: una remera fucsia y blanca, un pantalón de joggin gris, una bombacha blanca y una sandalia marrón correspondiente al pie izquierdo.
Al hacer una primera estimación de la data de muerte, el forense evaluó que la nena llevaba muerta de tres a cinco días, aunque aclaró que las altas temperaturas de los días previos pudieron haber influido en el estado de putrefacción.
Voceros policiales aclararon a Télam que todas estas conclusiones son preliminares y que las causas y circunstancias de la muerte de Sheila se conocerán con mayor certeza cuando esta tarde se realice la autopsia, cuyo inicio estaba estimado a las 13 en la morgue que funciona en el Hospital Carrillo de la localidad de Ciudadela.
En tanto, los tíos de Sheila que ayer quedaron detenidos acusados de ser los autores del asesinato, Leonela Ayala (24) y su marido Fabián González Rojas (24), serán indagados en las próximas horas por el fiscal de la causa, Gustavo Carracedo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 20 de Malvinas Argentinas.
Fuentes de la investigación indicaron ayer que, al quedar aprehendidos, ambos confesaron ante la policía y dijeron que no recordaban mucho porque estaban "muy drogados", pero ahora se espera que esa autoincriminación sea ratificada ante el fiscal Carracedo para que tenga validez judicial.
Sheila había desaparecido el domingo pasado alrededor de las 12 cuando fue vista por última vez jugando con amigos en el predio de San Miguel donde vivía con su padre.
Tras cuatro días de búsqueda y acusaciones cruzadas entre los padres por quién podía tener responsabilidad en la desaparición, ayer en una inspección casa por casa que hicieron los investigadores en el barrio, la policía bonaerense halló el cadáver dentro de una bolsa, en un sector donde se arroja basura entre dos paredones.
El sitio es lindante a la construcción donde viven los imputados, en cuyo domicilio se hallaron una muñeca Kitty, bolsas, cintas y sobre un colchón se detectó la presencia de moscas, por lo que una de las hipótesis es que pudo haber sido asesinada en ese departamento y luego arrojada desde seis metros de altura al hueco donde apareció la bolsa con el cuerpo.