El refrán popular reza que “no hay peor astilla que la del mismo palo”, y es lo que ocurre por estos días en Cambiemos con la cofundadora de esa alianza, Elisa Carrió. Los que estaban ilusionados con que iba a llamarse a la calma después de presentar el pedido de juicio político contra el ministro de Justicia, Germán Garavano, se equivocaron. Tal, como es su estilo, la líder de la Coalición Cívica no desperdició “munición gruesa” para disparar contra el presidente Mauricio Macri, el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y de vuelta contra Garavano. Los distintos medios porteños coinciden en identificar esta embestida con la figura del “fuego amigo”.
En una entrevista con el diario La Nación, Lilita dijo que para proteger a Macri estuvo “tapando cosas” porque “quería mucho” al Presidente. El ocultamiento de la verdad, según la legisladora, no fue gratuito: “me generó mucho cargo de conciencia”.
La diputada no especificó qué cosas tapó, aunque reconoció que le dieron un “gran cargo de conciencia”. En referencia al periodismo, apuntó: “yo ocultarle cosas a ustedes no puedo, yo soy representante de la ciudadanía”. A esto agregó: “hay verdades que si yo les digo, me internan en el Moyano, pero hay límites y el límite llegó, porque si no me iba a morir yo”, sostuvo. Y resaltó: “quiero que la sociedad entienda que no quiero romper Cambiemos, pero tampoco puedo romper mi conciencia; a mi la gente no me vota para que mienta”.
Respuesta irónica
“Lilita” también contestó las críticas que le dirigió Frigerio (fue para defender a Garavano contra el pedido de juicio político). El ministro del Interior también había dicho que el Presidente “es el garante de las luchas” que Carrió “ha defendido desde siempre”. La diputada aseguró que Macri “es el mejor candidato de Cambiemos para las presidenciales de 2019, por las decisiones que ha tomado durante su gestión”. “Rogelio (por el ministro de Interior) quiere ser Presidente. Con el peronismo puede. En Cambiemos, no sé”, lanzó ella.
Frigerio había dicho que no sabía por qué Carrió perdió la confianza al Gobierno en la lucha contra la corrupción. “Es algo que tiene que hablar ella con el Presidente”, sostuvo recientemente.
Sola, en el Congreso
Respecto de la presentación realizada en el Congreso pidiendo el juicio político para el ministerio de Justicia, la parlamentaria aseguró: “para nosotros es una cuestión de principios, no importa que no prospere”.
Luego recalcó: “alguien habrá entendido que yo discutí la autoridad (del presidente Macri), pero no: yo ejercí una facultad que es el pedido de juicio político, en ningún momento pedí la renuncia (de Garavano)”, agregó.
La droga “puesta”
Sobre Bullrich, Lilita aseguró que le ponen droga para decir que “están luchando” contra el narcotráfico. La legisladora, además, señaló que en las rutas argentinas y en los canales hídricos continúa el reparto de estupefacientes. “La cantidad de droga bajó, pero no significativamente, porque una parte de las Fuerzas de Seguridad la están engañando. Es decir le ponen droga para que aparezca, pero el negocio sigue”, sostuvo. En este sentido, indicó que quiénes la engañan son sectores de la Gendarmería y la Prefectura, “para decir: ‘estamos luchando’”.
El juez y Moyano
En otro momento de la entrevista, Carrió reconoció que se reunió con el juez que tiene una causa contra Hugo Moyano, dirigente sindical que están en la mira de la diputada.
Daniel Llermanos -el abogado de Moyano- había denunciado que la líder de la Coalición Cívica tuvo un encuentro con el juez Gabriel Vitale, de Lomas de Zamora, que tiene en sus manos una causa contra el líder del gravitante sindicato de los camioneros.
En esa reunión, la parlamentaria y el magistrado habrían conversado acerca de la causa y hasta la propia Carrió habría reconocido que no hay elementos para sostener un pedido de prisión.
Aunque arrancó diciendo que lo del encuentro era “mentira”, terminó reconociendo: “conozco al juez Vitale. Ha estado una vez en mi casa”. (La Nación)