Una notable jugada marketinera de Netflix

Una página en blanco, sin títulos ni firmas. Apenas este obituario: “UNDERWOOD, Francis J. (1959-2017). En conmemoración de la muerte de mi esposo y expresidente. De ti, me quedo con lo mejor. Claire Underwood, presidenta de los Estados Unidos de América”. Al pie, una bandera con las barras y las estrellas invertidas, símbolo de una de las series fundacionales y pilares del fenómeno Netflix. El aviso sorprendió el domingo a los lectores de los principales diarios del mundo -Argentina incluida- y provocó un doble efecto: el regocijo de los fans de “House of cards” y la curiosidad de los no iniciados. Una doble victoria para el departamento de marketing del gigante del streaming, que el 2 de noviembre estrenará la tan esperada -y última- temporada de la serie.

El escándalo que acabó con la carrera del actor Kevin Spacey -acusado de abuso sexual- parecía condenar a “House of cards” a un abrupto desenlace. Netflix resolvió el intríngulis apostando por la creatividad. En la ficción mató al personaje de Spacey (el presidente Underwood) y va preparando a los espectadores con una estrategia que se inició en los tráilers, donde se ve la tumba del presidente, y continúa con estas piezas, en las que se afirma el protagonismo de su esposa (encarnada por Robin Wright). Es una campaña costosa y con un condimento llamativo: la vigencia de los medios tradicionales como vehículo para articular esta clase de mensaje. A fin de cuentas, ¿dónde publicar una necrológica si no es un diario?