“Lo único que pretendo es que me digan bien lo que pasó. La Policía nunca me supo dar precisiones sobre lo ocurrido. Quiero que me digan la verdad. Creo que la muerte de mi hijo es otro caso Facundo Ferreira”, explicó Graciela Herrera, la madre de Ulises, el joven de 17 años que fue abatido por un Policía Federal en un supuesto enfrentamiento ocurrido el viernes en San Cayetano.
La mujer, acompañada por el abogado Manuel Pedernera, fue entrevistada por LA GACETA después de que asumiera el rol de querellante en la causa del homicidio que investiga la fiscala Adriana Giannoni. “Tengo muchas dudas sobre lo que pasó. Después de que pasaron los días, refresqué todas mis dudas y comencé a indagar lo que realmente ocurrió”, señaló.
- ¿Qué datos encontró?
- Herrera: En primer lugar mucho temor entre los vecinos del lugar donde sucedió el hecho. Me di cuenta de que algo malo hubo y que nadie lo quiere contar. Por eso también me demoraron en explicarme qué le había sucedido a Ulises. Son demasiadas cosas extrañas que quiero que se investiguen a fondo. Hablan de enfrentamiento, pero a mi hijo recibió los disparos por la espalda.
- Pedernera: no conocemos aún los resultados de pericias claves como si realmente Ulises disparó o si efectivamente hubo un enfrentamiento. Pretendemos que se haga una investigación seria para descartar nuestras sospechas. No está bien que sucedan este tipo de hechos y, por más que sean aceptados por gran parte de la sociedad, se debe investigar si el accionar del policía fue el correcto.
- ¿Ulises no se dedicaba al robo de motos?
- Herrera: No. Él no tenía nada que ver con eso. Él sí tenía una causa por homicidio que fue inventada por la Policía porque quería perjudicarlo.
- ¿Por qué cree que lo perjudicaron?
- Herrera: Porque Ulises sí tuvo problema con esa persona y yo soy la culpable. Él era el transa que le vendía drogas a mi otro hijo que actualmente está en la cárcel por culpa de esa porquería. Él siempre observó lo que esa persona generó en su familia. A mí me agredió varias veces y a su padre le dio seis disparos cuando fue a rescatar al hermano de la casa donde lo tenía encerrado para venderle porquería. Eso de que era un sicario era una mentira para perjudicarlo. Estuvo en el Instituto Roca 10 meses y tuvo una conducta intachable.
- Pedernera: tenemos todos los certificados que acreditan que él no tuvo ningún intento de fuga del Roca. Hasta nos quejamos por las sanciones que recibió cuando fue castigado por no haber contado cómo se habían escapado sus compañeros.
- Los mensajes que dejaron sus amigos en las redes sociales no lo favorecen…
- Herrera: Eso no son amigos de mis hijos. Hasta sospecho que fueron allegados al efectivo policial que mató a mi hijo. Ulises no era así. Él asistía a un establecimiento educativo y hasta realizaba distintos talleres. Además, es increíble lo que dice la gente a través de los comentarios. No lo conocían y dicen cualquier cosa de él.
- Pedernera: El problema es que por las señales que envía el gobierno se está naturalizando este tipo de episodios en nuestra sociedad. Por eso pretendemos que se haga una investigación exhaustiva.
- ¿Y la despedida a los tiros en el velorio?
- Herrera: Había muchísima gente allí y estaba en estado de shock. No sabía que estaba pasando eso afuera. Cuando comenzaron a realizar los disparos no entendía nada y tampoco estaba atenta a eso. Lo único que hacía era en consolar a su hermano.
- ¿Por qué?
- Herrera: Porque conseguimos un permiso de la Justicia para que abandonara el penal y pudiera despedir a su hermano. Él se sentía culpable por la muerte de Ulises. Él decía: ‘yo tendría que estar en ese cajón porque fui el que se mandó las cagadas, no él, que no había hecho nada’.