Frente a donde alguna vez estuvo la vieja cantina del Monumental, un camión hace las veces de custodio de un container gris con la apariencia del típico refugio de obra: nada extravagante y con apenas dos ventanas laterales que permiten el paso de la luz del sol y del viento hacia el interior del esqueleto de chapa. En ese container con la apariencia de un refugio se encuentra la cocina de la tecnología que comenzará a aplicarse a partir de los cuartos de final de esta Copa Libertadores 2018. En ese container están los ojos de quienes serán un apoyo del árbitro principal, a partir del reestreno del VAR en el torneo.
La opinión sobre la asistencia arbitral ha generado demasiada polémica. Y lo sigue haciendo pese a que en el en el Mundial de Rusia los números han sido positivos y el margen de error en las decisiones finales de los jueces haya tenido un acierto del 99%. Pero la pregunta que se repite es cómo funciona el VAR: por medio de un equipo de tres árbitros que disponen de las imágenes televisivas del partido tomadas desde distintos ángulos. Estos vigías están en conexión directa por un intercomunicador con el árbitro. Pueden advertirle sobre una acción en particular o bien pueden ser ellos los que reciban una consulta del hombre de negro en cancha.
La experiencia pre Mundial en la Copa Libertadores no fue la mejor. Está el recuerdo de la famosa semifinal revancha entre Lanús y River, en la que el juez, que siempre tendrá la última palabra y consideración, aplicó el VAR para acciones de Lanús (correctamente), pero no así en otras que eran a favor de River. “En teoría está bueno que ayuden a los árbitros con una herramienta como esa, pero siempre que se utilice bien”, señaló algo desconfiado Nery Leyes.
Charla informativa
Para que las dudas no abrumen a los jugadores, emisarios de la Conmebol visitaron anoche las concentraciones de Atlético y de Gremio. Fue una charla informativa dedicada al VAR y a sus funciones. “Mientras no se pierda la esencia del fútbol, todo bien”, opinó Cristian Lucchetti. “La esencia del fútbol es su dinámica, la improvisación y picardía de un jugador. Eso no debe perderse y el VAR no debería usarse para eso”, agregó. Justamente, la reunión de anoche, posterior a la cena, fue para explicarles a Lucchetti y compañía cuáles son los cuatro puntos en los que el VAR entrará en acción: goles, penales, tarjetas roja directa o confusión de identidad. Después, todo seguirá con su curso normal. Incluso puede suceder que el árbitro desista de pedir ayudar en el VAR y tomar él la decisión sobre estos cuatro ítems también.
“Espero que sea justo para todos”, fue el deseo de Rodrigo Aliendro, otro de los inquietos en cuanto a conocer un poco más acerca de la implementación de la tecnología. Lo bueno es que después de la conferencia que duró cerca de 20 minutos, los “Decanos” quedaron conformes.
En la cabina del VAR los tres jueces pueden ser una voz constante del árbitro principal, pero hasta que él no haga la señal de pedido de asistencia (marcar un recuadro en el aire), el juego no se detendrá. Si se detiene, hay una cabina especial en un sector del campo donde solamente podrá estar el árbitro. De hecho, hay una línea demarcatoria que nadie puede cruzar. Y si un futbolista intenta hacerlo o hablar con el árbitro en ese momento recibirá tarjeta amarilla.
“El VAR no está cambiando el fútbol, sino que lo está haciendo más justo”, aseguró el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, después del Mundial. ¿Será?