17 Septiembre 2018
Se cumplió hoy una semana desde el ingreso de Nahir Galarza a la Unidad Penal N°6 de Paraná, quien debió dejar la comisaría de la Mujer en Gualeguaychú para cumplir en la cárcel la condena a prisión perpetua que recibió por haber asesinado a su novio, Fernando Pastorizzo.
Si bien el primer día le concedieron un permiso especial por haber sido su cumpleaños -le permitieron pasar un momento con sus familiares-, desde el penal aseguraron que la joven de 20 año no goza de ningún privilegio.
Según publicó Clarín, Nahir se encuentra en un periodo de evaluación psicológica que determinará cuál es su estado mental y de ánimo. "Ella está todavía en este periodo. Con lo cual todavía no se le asignó ninguna tarea específica dentro del penal", comentaron a ese medio fuentes penitenciarias.
La rutina de las 88 internas comienza temprano a la mañana, cuando a las 6.30 se levantan para desayunar y empezar a trabajar. Hay dos opciones laborales: se puede estar en la cocina preparando las comidas del día o en la lavandería, que también ofrece sus servicio de limpieza a los vecinos que viven cerca del penal.
Sin embargo, Nahir todavía no tiene ninguna tarea asignada y pasa sus días dentro del pabellón donde duerme con otras cuatro mujeres, todas ellas vinculadas con policías presos por distintas causas.
"Ella pasa todo el tiempo ahí y sale al patio del penal cuando le toca", comentan desde la cárcel, la cual tiene en este sentido un programa muy estricto para usar el único espacio al aire libre.
"Hay siete pabellones y cada uno tiene una hora por día, un día específico", explicaron fuente carcelarias. Esto se hace para evitar problemas entre las internas de los distintos pabellones.
En cuanto a la salud y la seguridad de Nahir, los penitenciarios aseguraron que se "encuentra bien", que no ha tenido problemas con sus compañeras de pabellón y que come la misma comida que le sirven al resto de las internas. "Acá no no hay privilegios", aseguraron desde el penal.
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