El golpe que le dio Atlético a Newell's dejó mal parado a Omar De Felippe, cuya continuidad como director técnico del equipo rosarino dependerá del resultado que consiga en el encuentro del sábado a las 13.15, por Copa Argentina.
"La dependencia de un resultado es una injusticia. Nadie es mejor o peor si gana o pierde. Pero la realidad es que el ciclo de De Felippe se encuentra en declive y ante un nuevo traspié es complejo sostener este proceso, tanto para el técnico como para la dirigencia. La esperanza del DT es que esto último no ocurra y que una victoria revitalice el espíritu del plantel y así sea posible corregir el rumbo en la Superliga", publicó el diario La Capital.
El DT sabe qué está entre las cuerdas, y eso lo dejó en claro en las declaraciones realizadas tras la derrota con el "Decano": "mi termómetro son los jugadores. Esto no pasa por mí. El tema es cómo están los chicos, si ellos se animan a salir. Yo ya estoy curtido porque viví momentos como este muchos años".
Para la mencionada fuente, el ex Vélez no le encuentra la vuelta a Newell's. "A los rivales les alcanza con poco para superarlo. Atlético Tucumán fue el último que lo dejó en evidencia. Con libertades para atacarlo, se llevó la victoria en el Coloso llegando en contadas ocasiones. Si se hablase de boxeo, se diría que la lepra es un pugilista de mandíbula floja. Apenas lo golpean, se cae", publicó.
Es por eso que el partido del sábado, en cancha de Temperley, no será uno más. Al menos para la “Lepra”, que tendrá que ganar para levantar el aplazo que tiene en la Superliga. Los de Ricardo Zielinski podrían aprovechar esa desesperación y meterse en los cuartos de final de otro torneo que lo tiene como protagonista.