Los testimonios de la agrimensora Laura María de los Ángeles Villalba y del fotógrafo Oscar Esteban Valdez (ambos eran empleados de la Dirección Provincial de Vialidad) abrieron la jornada del juicio a tres imputados por el crimen de Javier Cristóbal Chocobar, quien murió tras recibir un disparo que le perforó la arteria femoral. En ese mismo hecho fueron baleados Emilio y Andrés Mamaní.
Villalba y Valdez fueron convocados por las abogadas de Darío Amín y Eduardo José Valdivieso Sassi, y el defensor de Luis Humberto Gómez. Ambos contaron que fueron convocados por Amín para constatar los límites de la finca y ubicar la fracción de tierra que reclama, origen de la disputa por tierras que terminó con la masacre del 12 de octubre de 2009.
Ese día, Amín, Gómez y Valdivieso fueron hasta el paraje El Chorro, donde vive la comunidad de Los Chuschagasta. Al llegar a cantera de piedra laja que Amín quería explotar y que -hasta unos días antes del día del asesinato- estaba bajo una medida judicial de no innovar, se produjo una discusión entre Emilio Mamaní y Gómez. Este último sacó una pistola y (según se vio en un video proyectado en la sala del juicio) disparó. Amín y Valdivieso también dispararon sus armas, y por eso no se pudo hasta ahora determinar con certeza cuál es la que mató a Chocobar.
El tribunal informó que la filmación será procesada en fotogramas por el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales del Ministerio Público Fiscal y estará lista en una semana.
De los ocho testigos que declararon ayer, dos fueron ofrecidos por las querellas: el cacique de Amaicha del Valle, delegado comunal y abogado Alfredo Eduardo Nieva, y el policía Jorge Osmar Alderete, que en 2009 era el segundo jefe de la comisaría 1°. Alderete fue quien constató el ingreso de los imputados en el Sanatorio Rivadavia .
Roberto Leonardo Cantero, que actualmente es taxista y que fue empleado de Santiago Amín (hermano del imputado), contó un incidente ocurrido el 17 de noviembre 2007, cuando tuvo que ir a buscar a Darío Amín a El Chorro. “Cuando llegué, dijo que le habían cerrado el paso de agua y parecía asustado”, contó. Ese día que se había interpuesto la medida de no innovar sobre los terrenos de la cantera.
El ingeniero agrónomo Juan Carlos Rongetti, director de Minería de la Provincia, explicó que Amín presentó en 2004 un pedido formal para la explotación de la mina, como administrador de la sucesión junto con su hermano y su madre. En 2005 se pudo registrar como productor minero y en 2006 se lo autorizó a iniciar la explotación, aunque en 2007 pararon por falta de fondos. En ese entonces, dijo, no hubo presentaciones de la comunidad indígena.
Los hermanos Sergio Nicolás Chaile y Carlos Dionisio Chaile, ambos empleados de la comuna de Anca Juli, dijeron que la propiedad “es de la familia Amín”. “La gente en la zona dice que es de ellos”, afirmó Carlos Chaile.
La sesión se reanudará hoy, a las 9, en España 430.