El sábado por la noche, Cardenales pudo por fin irse a dormir con la tranquilidad del deber cumplido. Haberle ganado a Jockey fue como poner en pausa el reloj de arena y regalarle una semana más de tiempo a su esperanza de meterse entre los clasificados al Súper 10 del Regional “Fredy Narese”. Claro que el trabajo todavía no está completo: el repaso de la Zona A lo encuentra todavía dos puntos por debajo de Universitario de Salta, hasta aquí el último clasificado.
Esas tres derrotas de entrada son un lastre que el “Purpurado” debe compensar antes de que se agote el tiempo. Por eso, para cuando llegue el domingo, necesita dominar el arte de transmutar la presión y convertirla en motivación, en combustible para salir a ganarle al campeón en su propia cancha. Esa alquimia se presenta necesaria sobre todo porque Natación parece haberse reencontrado con una versión propia que, sin ser todavía la que lo llevó al trono del NOA el año pasado, es más que suficiente para ponerle las cosas difíciles a cualquiera. Y sino, que lo digan los tres triunfos consecutivos con los que apagó la sequía que arrastraba desde comienzos del Nacional.
“Antes del partido contra Jockey hicimos una autocrítica muy grande entre todo el plantel y el staff. Pusimos en la mesa todo lo que nos jugamos en estas últimas fechas”, cuenta Blas Cabrera, para quien no hay dudas: “contra Natación, no es otra cosa que una final”.
Será el reencuentro por el Regional, ya que no se cruzaron el año pasado. Aunque sí en el Anual previo de este año, en el que “Nales” se impuso de visitante, la misma condición en la que deberá jugar el fin de semana. “Es una presión que nos pusimos nosotros solos. Cardenales no merece estar donde está ahora por un par de partidos malos que tuvimos”, admite Tobías Ruffino, para quien también se trata de una final hecha y derecha.
“Estamos tratando de hacer una semana perfecta para enfrentarnos al último campeón. Es un equipo muy peligroso, colectiva e individualmente, pero nosotros tenemos la motivación de saber que nos estamos jugando todo. Es una final”, reafirma Blas.