El Gobierno anunció anoche que el presidente Mauricio Macri canceló la visita que iba a realizar hoy a Rosario para encabezar el acto central por el Día de la Bandera, ante la posibilidad de que se generen disturbios en medio de un contexto político y social complicado, a raíz de la crisis financiera. La ceremonia está programada a partir de las 9, informó el diario "La Nación".
En un comunicado, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, dijo que habían recibido información de seguridad que indicaba que se debían reforzar las medidas de seguridad. Afirmó también que habló con el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, y coincidieron en que "lo mejor es dejar que los vecinos rosarinos puedan disfrutar con tranquilidad de los festejos patrios".
"El Presidente tomó esta decisión basado en preservar ante todo la paz y la seguridad de los rosarinos y solicitó que se informara a través de la prensa de los motivos de la cancelación de su visita", concluyó Frigerio.
El delicado escenario llevó al frente Cambiemos, además, a suspender el timbreo nacional programado para el próximo sábado en todo el país. "No es que la gente tiene incertidumbre, es que hay incertidumbre. Necesitamos un piso para después avanzar", afirmó un referente de la alianza gobernante.