El municipio deberá reforzar las inspecciones en los edificios

Los concejales de la oposición al intendente, Germán Alfaro (Cambiemos) cuestionaron la falta de inspecciones en los edificios en construcción y aprobaron una ordenanza para que los controles técnicos se realicen al menos una vez por mes. La iniciativa surgió como respuesta institucional ante dos hechos: la tragedia por el derrumbe del ex cine Parravicini -murieron tres vecinos-, y la treintena de edificios sin final de obra, con servicios instalados de modo precario, que están habitados.

La norma, aprobada en la sesión de ayer, establece que la Municipalidad realice al menos un control mensual en las construcciones de edificios de altura (que tengan más de dos plantas). Abarca también a las obras en ejecución de los inmuebles protegidos dentro del Sistema de Protección del Patrimonio Cultural de la Provincia (ley 7.500) y dentro del inventario de Sitios y Edificios de Valor Patrimonial de la Capital. Hasta ahora, las normas ordenan realizar tres controles obligatorios: inicial, concomitante y final.

“Debemos hablar del descontrol de la Municipalidad respecto a las edificaciones. Con esta norma queremos que los controles se hagan de oficio y no cuando la empresa quiera”, justificó el peronista Juan Luis Pérez, presidente de la comisión de Obras Públicas.

El artículo 2 del proyecto aprobado establece que las inspecciones serán realizadas por personal de Catastro Municipal “debiendo estar acompañados por profesionales de la construcción para efectuar un seguimiento en el avance de la obra y determinar si se respeta” el proyecto de obra. El artículo 3 incluye la figura de la auditoría externa: “cuando haya objeciones entre el responsable de la obra o el propietario, podrán solicitar auditorías externas, para lo cual se faculta al Departamento Ejecutivo a firmar convenios con los colegios profesionales”. Se ordena crear el Registro de Profesionales de la Construcción que deseen participar como Peritos Inspectores.

“No podemos dejar que las empresas hagan lo que quieran. El Estado tiene que intervenir controlando, porque no puede ser que se caiga el ex Parravicini”, arremetió Pérez. Y agregó: “en la documentación (de la obra) se expresa que había una superficie que iba a demolerse y no había plano de apuntalamiento. La última inspección, de agosto, decía ‘Ya está colocado el cartel de obra’. Si no vamos a la profesionalización de las inspecciones los controles seguirán siendo descontroles”.

El aliado a la Intendencia, Raúl Pellegrini, se manifestó en favor de incrementar los controles, pero propuso dos cambios. Que las inspecciones mensuales se realicen en las obras de más de tres plantas y que el municipio no pierda el “poder de Policía” sobre las construcciones. “Propongo que se cree un registro de profesionales de colegios de Arquitectos o Ingenieros, y que en caso de que el staff de inspectores municipales no sea suficiente para controlar todas las construcciones se asignen determinadas obras para estos profesionales”, propuso. Su compañero de banca, Rodolfo “Johny” Ávila asentía con la cabeza. “No se puede decir que hay descontrol. Hay una empresa que tiene que demoler acá cerca, porque la constructora planteó hacer un Salón de Usos Múltiples que no estaba permitido, que no será un nuevo departamento pero cuenta como piso. La Municipalidad lo intimó a que modifique la construcción, así que no se puede decir que no hay control”, chicaneó Pellegrini, en alusión al edificio de Avanco levantado en la ex radio LV12 (Rivadavia al 100).

A la hora de votar se impuso el proyecto del peronismo sin las modificaciones de Pellegrini: se aprobó con los votos de Pérez, David Mizrahi, Belén Cruzado Sánchez, Dolores Medina, Dante Loza, Matías Figueroa (todos del PJ), Ricardo Bussi y Eduardo Verón Guerra (de Fuerza Republicana). En contra, votaron Pellegrini, Sandra Manzone, Roberto Ávila, “Johny” Ávila, José Argañaraz, Roque Mendía y Javier Aybar. José María Franco presidió la mitad de la sesión por el viaje de Alfaro (Armando Cortalezzi quedó a cargo del Municipio). El radical Agustín Romano Norri faltó.