"Desde hace un tiempo, en la zona de El Corte sufrimos robos. Las casas que están cerca del Hogar San Agustín son asaltadas durante las siestas". Quien habla es Ramiro Juliá, un vecino de ese sector pedemontano de Yerba Buena. Según sus dichos, los delincuentes pueden darse a la fuga con las cosas hurtadas, con tranquilidad, porque escapan desde las fincas de limones hacia el río Muerto.
Campero vetó una ordenanza que él mismo había promovido sobre urbanizaciones en el piedemonte
"En las últimas tres semanas, hubo unos ocho robos con la misma modalidad", añade Juliá. Luego cuenta que han mantenido una reunión con el secretario de Seguridad Ciudadana, Mauricio Argiró, y con la Policía de El Corte. "La predisposición de la Municipalidad es excelente. Pero hace falta más. De parte de ellos y de los vecinos, que tienen que hacer las denuncias", comenta.
Ayer, justamente, un policía -cuenta Juliá- persiguió a unas personas que habían merodeado una vivienda. Los sujetos huyeron por las quintas y por el lecho del río hasta el barrio 40 Viviendas, cerca del country Los Nogales.