BERLÍN/MADRID.- El presidente de la organización anticorrupción Transparencia Internacional (TI) en España, Jesús Lizcano, subrayó que la corrupción en España, a pesar de salpicar a diversos estamentos de la vida pública, desde la monarquía a los empresarios o banqueros, es de índole fundamentalmente política. “La corrupción no es sistémica, esto es, no afecta a todo el sistema administrativo, político o judicial, sino que es una corrupción eminentemente política, según se desprende del Índice de Percepción de la Corrupción y del Barómetro Global de la Corrupción”, indicó Lizcano.
España vivió una semana de infarto en la que la corrupción hizo caer en apenas unos días al Gobierno del conservador Mariano Rajoy a raíz de una moción de censura planteada por el Partido Socialista (PSOE), que se puso al frente del Ejecutivo. “En otros países efectivamente la corrupción es sistémica y todos los ámbitos de la sociedad están contaminados de corrupción. En España se centra en la clase política y los gobernantes, con la complicidad de las empresas que son las que les pagan”, agregó.
En opinión de Lizcano, el país ibérico todavía se encuentra a gran distancia de otros socios europeos como Alemania, donde en la esfera política impera una cultura “bastante más ética y rigurosa, además de ejemplarizante, en el tema de las dimisiones”. (DPA)