“Lo vamos a encontrar”, aseguró la mujer del taxista desparecido

“Estamos desesperados y angustiados, pero lo vamos a encontrar”, afirmó Brenda Petrelli. La mujer se trasladó ayer hasta Santa Lucía para continuar con la búsqueda de su pareja, el taxista Adán Chipolari, quien está desaparecido desde hace 13 días. Llegó hasta ahí, junto con parientes, ampliando el rastrillaje hacia el suroeste de la provincia, luego de cubrir áreas de la comuna de San Pablo.

“Salimos a distintos lugares. Subimos a los cerros. Fuimos a San Pablo, donde dejaron el auto (el taxi). Recorrimos todo alrededor. No perdemos la esperanza; confiamos en que lo vamos a encontrar”, enfatizó.

Petrelli, además, dijo que solicitará al Gobierno que “ofrezca una recompensa para quien aporte información certera sobre el paradero” de Chipolari.

El hombre, de 39 años, salió de su hogar el jueves 17 pasado para trabajar en un taxi Fiat Uno, por la mañana. Desde ese día, la familia no ha sabido nada de él. Luego, el vehículo apareció con signos de violencia en un cañaveral de Manantial Sur.

"Encontraron el taxi todo abierto, con las cerraduras forzadas"

Chipolari tiene cuatro hijos, mide 1,82 metro y es de contextura robusta, pelo negro corto y ojos marrones oscuros. No tiene tatuajes ni cicatrices. El último día que su esposa lo vio, llevaba una campera de algodón celeste y blanca con capucha, un pantalón de jean y zapatos color crema.

El lunes, la Policía, al mando de los comisarios Marcelo Salla y Ricardo Villagra, realizó un amplio rastrillaje en un cañaveral de la zona donde encontraron el vehículo, pero no se hallaron rastros del conductor. También se utilizó un helicóptero, que recorrió varios puntos seleccionados, desde Manantial Sur hacia zonas aledañas y la localidad de San Pablo.

Continúa el misterio sobre el paradero del taxista Chipolari: "no sabemos si vive o no"

En el procedimiento participaron policías de Infantería, Delitos Rurales, Trata de Personas, Caballería y Bomberos de San Miguel de Tucumán. Según se informó, se dispuso a los efectivos en forma lineal, mientras que el personal de Caballería se movió por la parte exterior y las adyacencias del cañaveral.

“(Chipolari) salió de la casa a trabajar entre las 9.30 y las 10. Dijo que iba a regresar a la noche, pero nunca volvió. Lo esperé durante la madrugada, porque había trabajado en una época de noche. Realicé la denuncia al día siguiente”, recordó Petrelli.

Por cualquier novedad, dirigirse a la Dirección de Investigaciones de la Policía (División Delitos contra las Personas), en calle Junín 850, en la capital, o comunicarse al teléfono 3814426038. También, llamar al servicio de Emergencia 911 o a la línea 3814426226, o dirigirse a la comisaría más cercana.

“Él es bueno. No es una persona rara. Tampoco fuma, bebe ni juega (por la adicción a los juegos electrónicos o azar). Es solidario y ayuda a la gente de la calle”, lo describió la mujer.