La producción de la industria PyME creció el 2,5% en abril y registró el décimo mes consecutivo de alza, de acuerdo con un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
“A pesar de la mayor volatilidad económica, la producción de las PyME Industriales creció 2,5% en abril frente a igual mes del año pasado, cumpliendo así 10 meses consecutivos en alza y acumulando un incremento de 2,8% en los primeros cuatro meses del 2018”, indicó la CAME en un comunicado.
No obstante, la proporción de empresas en alza se redujo a 44,3%, en tanto menos fábricas registraron rentabilidad positiva y el uso de la capacidad instalada bajó a 62%.
Sin inversiones
Sobre esos resultados, el 84% de los empresarios evalúa que no es un buen momento para invertir, especialmente cuando el 23% de las PyME cree que en los próximos meses la actividad podría continuar cayendo.
Frente a marzo se registró una caída de 2,3% (en la medición con estacionalidad), que en parte se explica por la menor cantidad de días hábiles. “Abril fue un mes donde la actividad general continuó progresando pero con al menos tres obstáculos: se deterioró la cadena de pagos y hubo más problemas para cobrarle al cliente; subieron los costos financieros y eso deterioró la rentabilidad; menos empresas crecieron y aumentó la brecha entre los empresarios que les va bien y aquellos que les va mal”, detalló el informe.
De los 11 sectores relevados, ocho crecieron, dos cayeron y uno se mantuvo sin cambios (siempre hablando de la comparación anual). Tuvieron evolución anual Material de Transporte (14,5%), Productos químicos (5,4%), Papel, cartón, edición e impresión (4,7%), Productos de metal, maquinaria y equipo (4,3%), Minerales no metálicos (3,3%), Calzado y marroquinería (3,0%), Productos textiles y prendas de vestir (0,6%) y Maderas y Muebles (0,5%).
Registraron bajas anuales Alimentos y bebidas (-1,5%) y Productos eléctrico-mecánicos e informática (-4,4%), y se mantuvo sin modificación los Productos de caucho y plástico.
Abril fue un mes donde las empresas debieron absorber nuevas subas de costos (tarifas, materias primas, insumos principalmente), lo que derivó en un declive en la proporción de industrias con rentabilidad positiva (de 54% en marzo a 46,7% en abril). (Télam)