El flagelo de la droga en Tucumán y las estadísticas que el miércoles a la noche brindó en “Panorama Tucumano” el fiscal federal Pablo Camuña tuvieron inmediata repercusión ayer en distintas áreas de la provincia, entre ellas en la Legislatura.
Stella Maris Córdoba y Julio Silman, miembros de la Comisión de Seguimiento de la Ley de Emergencia en Seguridad, coincidieron en que todo lo que se pueda hacer es poco, pero que no hay que quedarse con eso, sino en seguir trabajando.
“Es un tema muy difícil de medir. No tenemos datos reales del consumo de droga que hay en la provincia. Y ahí está el punto. El problema es que tenemos que hablar todos de acuerdo a las percepciones que tenemos. Hablo de lo que veo en los barrios que visito; a los que me transmiten las madres o las maestras en las escuelas en esas zonas vulnerables. Y la verdad preocupa ver que cada vez son más los menores de edad que empiezan a consumir”, dijo la legisladora en el programa “Buen Día”, de LA GACETA.
La ex diputada nacional aseguró que “hay responsabilidades compartidas, tanto de la Justicia como del Estado. Hace falta un poco más de coordinación de esfuerzos para llegar a los lugares desde la prevención”. También opinó con respecto a los dichos del ministro de seguridad, Claudio Maley, quien había asegurado que “el narcotráfico puede tener contacto con Tucumán, pero no es el origen ni el destino”, palabras que luego, según él, fueron mal interpretadas. “Cuando fue el ministro (Maley) a la Comisión de Seguridad le pedí explicaciones sobre lo que había dicho. Si bien es cierto que ratificó algunos términos, no ofreció los datos estadísticos que se necesitan para comprobar sus dichos. Acá lo importante, más allá de las declaraciones, es qué podemos hacer cada uno de nosotros para impedir que esta situación continúe”, dijo Córdoba.
Sobre cómo debe actuar la Legislatura, dijo: “estamos trabajando en el ámbito de modificar el Código Procesal Penal. El narcomenudeo preocupa. La cadena de la droga es muy larga. El que consume se convierte en alguien que vende”, afirmó. Se refirió así a la polémica por la implementación del mentado Código, que por pedido de la Corte Suprema de Justicia, fue pospuesto para febrero del año próximo. Dentro de las modificaciones se analiza la posibilidad de que la provincia investigue los delitos de narcomenudeo.
Silman, quien supo presidir la comisión de seguimiento, advirtió que “más del 75% de los delitos que se están cometiendo están relacionados con las adicciones”. “La droga está en cada barrio y lo vemos con preocupación. Todos tenemos que poner algo de nuestra parte y hacernos cargo de combatir este flagelo”, especificó.