“Fueron ‘changos’ de El Sifón, pero yo no los mandé”, dijo “El Gordo” González

“Ya no sé cuántas veces me mataron en el día. Me metieron en un bardo en el que no tengo nada que ver. Estoy a disposición de la Justicia para que me investiguen todo lo que quieran”, aseveró Gustavo “El Gordo” González, uno de los acusados por Margarita Toro de haberla secuestrado junto con integrantes del Clan Acevedo.

- ¿Por qué cree que lo acusan?

- La verdad es que no tengo ni la menor edad. No tengo nada que ver. Sí ocurrió un episodio, pero no fuimos nosotros los que estuvimos involucrados.

- ¿Es cierto que están enfrentados con los Toro?

- Todo comenzó con un problema que tuvimos con ellos hace menos de una semana. Abel, que es uno de mis hijos, fue asaltado por Maxi Toro en la avenida Juan B. Justo. Le robó la moto de “cheto” con la que compite su hermano Ezequiel.

- ¿Qué pasó?

- Hicimos la denuncia correspondiente en la Policía y continuamos con su trámite en la Justicia. Tratamos de recuperarla y no lo conseguimos. Tratamos de hablar con ellos y la respuesta que recibimos es que matarían a nuestra familia. A mis hermanos, que están en la cárcel, también les hicieron llegar ese mensaje. En el penal hubo problemas porque ellos provocaron a mis hermanos.

- ¿Cómo continuó el asunto?

- Ayer nos enteramos dónde la tenían. Volvimos a pedir a la Justicia que actúe antes de que la vendan. Tampoco tuvimos suerte, no salieron las órdenes de allanamientos que habíamos pedido. Sabíamos que querían venderla y por eso estábamos muy apurados.

- ¿Y por qué lo acusan a usted y a tu hijo de haber cometido el secuestro?

- Después, “changos” de El Sifón, que nos conocen y son leales a nuestra familia, fueron a buscarla. Como no la encontraron, fueron hasta la casa de ella y la agarraron. Les dijeron que la liberarían cuando la moto apareciera. Por ahí puede venir la confusión.

- Es extraño que por motu proprio los “changos” de El Sifón hayan decidido actuar solos...

- No los mandé. Ellos fueron solos. No puedo decir por qué lo hicieron. Me imagino que debe haber sido porque nos querían dar una mano.

- ¿Cómo se enteró de lo que estaba pasando con Margarita?

- Estaba en casa, descansando muy tranquilo. Cuando me enteré de lo que estaba sucediendo les dije que la soltaran inmediatamente, que no quería tener problemas con esa gente que es muy peligrosa. No les tengo miedo, pero temía por la salud de mis familiares. Y eso es lo que pasó. No es cierto que hayan cobrado un rescate; a lo sumo le quitaron la cadena de oro que ella tenía. Apareció la moto y los “changos” la terminaron soltando.

- Muchos aseguran que este hecho puede generar una escalada de violencia...

- No tengo la menor duda. Esto puede generar muchos problemas entre los barrios. A ellos no les importa nada y por eso nadie los quiere ni los sigue. Tienen problemas con todos. Tienen plata y poder porque son narcos. ¿O de dónde creés que sacan la plata para tener un Mini Cooper o un BMW?