En Concepción apuran los trabajos para que Macri inaugure la flamante terminal de ómnibus

Una de cal y otra de arena. Así podrían resumirse las novedades que en el transcurso de la semana pasada recibió el intendente de Concepción, Roberto Sánchez, desde el Concejo Deliberante de esa ciudad. Es que, por un lado, le dieron las herramientas necesarias para liquidar el último tramo previo a la inauguración de la nueva terminal de ómnibus. Pero, por el otro, le advirtieron que no le aprobarán una ampliación del Pacto Social ya firmado con la Provincia.

El cuerpo deliberativo, en su sesión del jueves, aprobó por unanimidad la normativa que regulará el funcionamiento de la flamante terminal. De esta manera, la estación quedó legalmente en condiciones de entrar en funcionamiento. Sánchez dijo que para su inauguración fue invitado el presidente Mauricio Macri, pero aún no tenía confirmación de su visita.

Pero luego de aprobarse el reglamento que regirá el funcionamiento de la terminal de ómnibus, el titular del Concejo, Sergio Castillo (FpV), salió a aplacar la alegría de los funcionarios municipales. En declaraciones a la prensa dejó trascender que su bloque, que es mayoría en el Concejo (cuenta con ocho de los 12 ediles), no va a habilitar al jefe municipal para que proceda a firmar con la Provincia la ampliación del Pacto Social que venció el 31 de marzo. “Si Sánchez no rinde cuentas con precisión sobre lo que está gastando en obras públicas, no vamos a permitir que se siga endeudando con la Provincia. Y estamos hablando de más de $ 350 millones en danza”, advirtió el edil.

Castillo dijo que la aprobación de la reglamentación del funcionamiento de la nueva Terminal es una forma de apoyar una obra que es muy anhelada por la comunidad desde hace muchos años. “Hemos demostrado que vamos a estar a la par de la Intendencia en todo lo que signifique mejorar la calidad de vida de la gente”, apuntó.

Sin embargo, remarcó que el Concejo Deliberante no va a resignar por ello su rol de contralor del erario público.

El Pacto Social es un acuerdo por el cual los municipios que lo suscriben ceden a la Casa de Gobierno los fondos que les corresponden por Coparticipación Federal de Impuestos; mientras que el Poder Ejecutivo se hace cargo de la planilla salarial de esas intendencias, a la vez que les financia obras públicas.

Sánchez consideró que las advertencias de Castillo son parte de “las chicanas a las que nos tiene acostumbrados el cuerpo”.

“Necesitamos entrar en el Pacto porque así estamos funcionando, la gente trabaja y la ciudad crece. En los otros municipios los ediles no tienen inconvenientes en aprobarle el Pacto a su intendente y no por un año, sino por tres o cuatro años. Aquí no. Nos habilitan por un año y con problemas”, se quejó.

El referente de Cambiemos insistió en plantear que los $ 277 millones en deuda que arrastra el municipio son por el Pacto Social. “Sin esta asistencia que brinda la Provincia, las 15 intendencias beneficiadas serían inviables”, aseguró. “El Pacto Social aparece para solucionar lo que no se reparte por coparticipación. En promedio, las provincias coparticipan a sus municipios un 26% de lo que le llega de la Nación. En Tucumán es sólo el 16%. Es decir que si hoy Concepción está recibiendo $ 16 millones por mes, esa cifra debiera elevarse a $ 26 millones en función del promedio país”, comparó.

Sánchez también expresó que las provincias coparticipan a los municipios hasta el 47% de lo recaudado por Ingresos Brutos. “Tucumán tiene 0% de coparticipación por ese tributo”, insistió. “El Gobierno provincial sabe perfectamente que lo que se destina a los municipios no alcanza. De ahí el Pacto Social, que se distribuye discrecionalmente. Hay intendencias con muchos menos habitantes que nosotros, y sin embargo reciben más recursos”, cuestionó.