En 1957, desde el extranjero, uno de principales pensadores políticos argentinos del siglo XX, Arturo Jauretche, escribía “Los profetas del odio”. Dos años más tarde nacía el hoy presidente, Mauricio Macri. Casi seis décadas después, estos nombres quedaron plasmados en las páginas de un libro homónimo, inspirado en el original, y presentado ayer en Tucumán por su autor, el referente kirchnerista Aníbal Fernández.
“Esa obra intenta demostrar que desde 1810 hay una definición estratégico-político (con ese objetivo). Los profetas se han valido del odio para tapar algunas cosas”, afirmó el ex jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner, en una entrevista con Buen Día, el ciclo matutino de LAGACETA.com. Y sostuvo que los actores políticos incluidos en la tapa de su libro, como Macri y la diputada Elisa “Lilita” Carrió -entre otros dirigentes contrarios al kirchnerismo-, mantienen la postura de “generar odio para ocultar muchas de las cosas que critico fuertemente de la gestión de gobierno”. Y luego de ubicarse en la vereda opuesta más lejana al macrismo, agregó: “estos son chorros; nosotros, no”.
En los casi 20 minutos que duró la entrevista en los estudios de “LG PLAY”, Fernández cuestionó las estrategias económicas y sociales de la Casa Rosada y defendió la administración kirchnerista.
“No viví de la política sino que vivo para la política. Creo en la política fuertemente. Por eso defiendo a los políticos, aunque no sean de mi partido, cuando están trabajando y aun cuando tengamos ideas contrarias. Esta gestión de Gobierno ha demonizado a la política para traernos los CEO, que tanto saben. Veamos a Luis Caputo, que hace unos días pasó por el Senado”, manifestó el ex candidato a gobernador bonaerense por el FpV. Y cuestionó al ministro de Finanzas de la Nación por la causa sobre la venta del “dólar futuro”, al asegurar que esa presunta maniobra le generó “$350 millones”.
“No tengo fueros”
Fernández admitió que en la gestión kirchnerista se registraron hechos de corrupción, pero advirtió que eso sucedió “en casi todos los Gobiernos”. “Hay que hacerse cargo de esas situaciones. Hace dos años y pico que no tengo fueros y sigo caminando por la calle, sin custodia”, indicó el ex senador nacional. Y se desligó de la figura del tucumano José Francisco López, ex secretario de Obras Públicas durante la era “k”, detenido y acusado de presuntos cobros irregulares. “Yo nunca me llevé un bolso con plata. No me comparen”, reclamó. Diferenció este caso, además, con el del ex ministro de Planificación y hoy diputado, Julio De Vido. “Todavía no está condenado, lo han detenido de forma ridícula”, añadió.
Rechazó luego que el kirchnerismo sea el culpable de la mala situación económica del país, como afirma Cambiemos. “Es mentira. ¿Cuánto es el nivel de reservas que encontró? ¿Cuánto tenía en endeudamiento? ¿Cuánto tiene de reservas? ¿Cuánto tiene de deuda? No tiene ningún sentido que nos quieran decir que nosotros lo generamos”, aseveró Fernández.
También se le consultó respecto de las acusaciones mediáticas de dirigentes opositores que lo vincularon al narcotráfico. “(En 2015) competí por la gobernación de la provincia de Buenos Aires. El 2 de agosto de ese año, Canal 13, (Jorge) Lanata y toda esa historia me hicieron un programa específicamente para hacerme perder. Esa causa se elevó a juicio oral y público. No existo ni en el canto de una hoja. ¿Y qué hacemos ahora? ¿Quién me pide perdón ahora? ¿Cómo me arreglan la situación política? Competí en desigualdad con el resto. Es la hijaputez que han hecho con un candidato, que no se ve en la historia de ningún país”, señaló el funcionario, que participó ayer de un acto en la sede del PJ junto a la presidenta local, Beatriz Rojkés.
Con relación a la intervención del partido a nivel nacional, afirmó que se trata de un “mamarracho sin sentido”. “No va a prosperar, es una burrada. Lo que han querido hacer en cabeza de este despreciable de Luis Barrionuevo es querer sacar de circulación al peronismo. Es un alcahuete por naturaleza y cercano a posiciones del presidente (Macri), la vocación es perjudicar al peronismo en próximas elecciones”, sentenció.
Fernández además se definió como “amigo” del gobernador Juan Manzur y del antecesor de este, el hoy senador José Alperovich. Y no ahorró elogios hacia el primero de ellos. “Está haciendo una gestión muy buena. Fue uno de los mejores ministros de Salud del país. Tiene que tener relaciones equilibradas con el Gobierno nacional; tiene que gobernar para los tucumanos y no para los peronistas”, señaló el referente kirchnerista.