El tratamiento del Boleto Universitario debió posponerse por una desinteligencia en la Intendencia capitalina

El desconocimiento de la agenda del intendente, Germán Alfaro, ocasionó que pase a un cuarto intermedio hasta mañana el tratamiento del proyecto de Boleto Universitario, que tenía previsto aprobar hoy el Concejo Deliberante de la capital a instancias de una iniciativa de la oposición. 

El problema se generó porque Alfaro se encontraba en Buenos Aires al momento en que se llevaba a cabo la sesión en el recinto parlamentario de San Martín y Monteagudo. Sin embargo, desde la Intendencia habían dado por hecho que el jefe comunal iba a estar presente en la provincia durante esta jornada, por lo cual se firmó un decreto que habilitaba al presidente del Concejo, Armando Cortalezzi, a dejar sus funciones como intendente interino.

Pero Alfaro finalmente no llegó, y se generó en el recinto un debate sobre la validez o no que tendría una ordenanza que podría ser cuestionada por haber sido sancionada en el marco de una situación institucional poco clara. Así fue que el cuerpo deliberativo decidió posponer el tratamiento de la iniciativa. 

El dictamen de mayoría en el Concejo establece que se habilitarán cuatro viajes diarios, de lunes a sábados, para los beneficiarios, durante el ciclo lectivo. Podrán solicitar la tarjeta los estudiantes universitarios y terciarios que tengan domicilio en San Miguel de Tucumán; que vivan a más de nueve cuadras de los establecimientos y que asistan a centros públicos ubicados en la capital. Los ingresantes y alumnos regulares podrán acceder al beneficio (deben aprobar dos materias al año). Los miembros del interbloque Acuerdo para el Bicentenario-Cambiemos firmaron un dictamen de minoría en el que rechazaban el proyecto, por su tratamiento acelerado.