Estados Unidos quiere revisar redes sociales para dar visas a los extranjeros
El Gobierno de Trump también busca pedir a los solicitantes de ingreso sus números de teléfono, direcciones de correo e historial de viajes. La Corte Suprema deberá revisar la legalidad de la medida en los próximos meses. 15 millones de personas cada año deberán brindar sus datos personales para ingresar a EEUU.
WASHINGTON.- El Gobierno de Estados Unidos planea pedir a todos los solicitantes de visados sus nombres de usuarios en las redes sociales, direcciones de correo electrónico y números de teléfono, así como su historial de viajes internacionales. Así lo confirmó una nota oficial del Departamento de Estado, publicada en el Registro Federal del país norteamericano.
La medida afectaría tanto a solicitantes de visas migratorias como a solicitantes de visas no migratorias, que suman en total unos 15 millones de personas al año. Los datos que tendrían que ser brindados para ingresar al país son los correspondientes a los cinco años previos del pedido. La información obtenida sería utilizada para identificar o investigar los antecedentes de los solicitantes.
El objeto de la publicación de la nota oficial en el Registro Federal es recibir comentarios del público durante 60 días, tras los cuales la nueva directiva entraría en vigor. La medida se enmarca en el endurecimiento que la gestión del presidente Donald Trump está desarrollando en los procesos de evaluación de turistas y posibles inmigrantes.
El Departamento de Estado dará a a conocer las propuestas concretas el viernes, que deberán contar con la aprobación de la Oficina de Gerencia y Presupuesto. Hasta ahora, datos como los nombres de usuarios en las redes sociales o las direcciones previas de correo electrónico sólo se piden a solicitantes de visas con situaciones especiales, como haber viajado previamente a zonas que Estados Unidos considera controladas por organizaciones terroristas.
Las propuestas responden a las promesas de campaña realizadas por Trump durante su campaña para llegar a la presidencia de Estados Unidos en 2016, relativas a tomar medidas enérgicas contra la inmigración ilegal por razones de seguridad y su llamado a realizar una “investigación exhaustiva” a los extranjeros que entran al país.
Con respecto a los diplomáticos que ingresan a Estados Unidos, el Departamento de Estado aseguró que no tiene la intención de pedir rutinariamente a la mayoría de los funcionarios extranjeros que soliciten visas su información en las redes sociales.
La tercera versión
Los tribunales estadounidenses ya vetaron las primeras dos versiones de las normativas de viajes realizadas durante el actual gobierno republicano, por lo que la actual tiene un alcance menor. La Corte Suprema considerará su legalidad en los próximos meses y se espera una decisión durante junio.
Al poco tiempo de asumir, Trump había prohibido, mediante un decreto ejecutivo, la entrada a Estados Unidos de siete países de mayoría musulmana: Irak, Siria, Irán, Libia, Somalia, Sudán y Yemen, con el objetivo de “proteger a la Nación de la entrada de terroristas extranjeros”. Luego de varios reveses judiciales, la Corte Suprema restableció el veto migratorio en junio, pero con algunas modificaciones. (Especial)