Un Jesús que viste poncho y alpargatas

En vez de soldados romanos, quienes clavan a Jesús en la cruz visten uniforme de las tropas federales. Ese es sólo un signo de los muchos que caracterizan a “El Evangelio Criollo”, la obra poética musical del sacerdote jesuita Amado Anzi, que está ambientada en el campo argentino.

Por este motivo, el Cristo protagonista tiene poncho, usa alpargatas y toma mate. Y todos los elementos escénicos de la puesta que se verá mañana, desde las 21.30 y con entrada libre y gratuita empezando en la plaza 9 de Julio de San Isidro de Lules, tienen características gauchas.

La propuesta se suma desde este año, y con la idea de que se mantenga en el tiempo, a partir de la propuesta del grupo folclórico Gato Negro y la participación del ballet tradicionalista que dirige Silvio Jaime, responsable también de la adaptación de la obra original estrenada en 1964.

“En la puesta en escena intervendrán más de 120 artistas luleños, de los cuales la mitad es miembro de mi academia -explica Jaime a LA GACETA-, aparte de la intervención de técnicos y asistentes. Hacemos la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús, no la parte de su vida. Queríamos hacerla en nuestro pueblo y con la gente del lugar, para todos los que no pueden trasladarse y para quienes quieren ver algo diferente”.

La propuesta comenzará al aire libre al finalizar la misa de resurrección, con Gato Negro cantando parte de la Misa Criolla, de Ariel Ramírez, para luego dar paso a la creación de Anzi, con la cual artistas y público recorrerán parte de la peatonal Juan Pablo II al ritmo de salmos, candombe, zambas carperas y chacareras truncas. Todo concluirá nuevamente con Gato Negro y la interpretación del “Gloria”, de la Misa Criolla. En total, el espectáculo religioso durará unos 70 minutos, sin intervalos.

“Lo que nos va a diferenciar de otras propuestas es el sentir criollo y argentino del texto bíblico. Todo estará marcado con el trasfondo musical y con la vestimenta elegida, que es muy atractiva”, explica Miguel Ángel Rocha, músico de Gato Negro. Su colega Matías Aparicio agrega: “apuntamos a convocar tanto a los creyentes como a quienes les gusta el folclore, porque sin desvirtuar el mensaje religioso imaginamos cómo sería un Jesús nacido en la Argentina, y qué significaría su mensaje”.

Mientras que Rocha es católico practicante, su compañero reconoce no ir a la Iglesia. “La creencia no incide en lo artístico. Por ejemplo, Jaime Torres grabó el charango en la creación de Ramírez, pese a ser agnóstico. Somos respetuosos de todos los sentimientos, y me emociona mucho ver una procesión”, explica Aparicio. Sergio Jaime incluso estudió durante cuatro años en el Seminario Menor para ser sacerdote.

El grupo grabó el año pasado su propia versión de la Misa Criolla, y a fin de año harán una nueva, ya que la formación tuvo cambios. Aparte de los dos mencionados antes, la integran además Jonhy Amaya y Mauricio Seballos.

Teatro
“Las mujeres no saben decir adiós”, en El Árbol de Galeano
El grupo Per Secula Seculorum presentará nuevamente esta noche la obra de Fabrizio Origlio “Las mujeres no saben decir adiós”, con las actuaciones de Carina Morales Estrada, Liliana Sánchez, Lourdes Aguirre y Marcela Jaime, bajo la dirección de Cristina Fiz Lobo.
El texto se centra en una importante psicóloga que escribe un libro con casos de sus pacientes, lo que la lleva a relatar diversos problemas afectivos de las mujeres bajo tratamiento. La función será a las 22 en El Árbol de Galeano (Virgen de La Merced 435). En el Teatro de la Paz (9 de Julio 162), a las 22 subirá a escena el clásico de Carlos Gorostiza “El acompañamiento”, sobre los sueños incumplidos de un hombre mayor que recibe la ayuda de su mejor amigo, interpretados por Miguel Herrera y José Cabrera. Una hora más tarde se repondrá “Cuarentona al ataque”, unipersonal a cargo de Leonor Monzón. Las dos propuestas son dirigidas por Sebastián Olarte.

Cine
Un recorrido por tres géneros en el Espacio Incaa taficeño 
Un recorrido por tres géneros caracteriza la cartelera de hoy en el Espacio Incaa Mercosur de Tafí Viejo, que funciona en el cine teatro de la Sociedad Española (avenida Alem y Belgrano). En primer turno, a las 18, se proyectará la película para todo público “Ozzy, rápido y peludo”, una producción de animación centrada en un simpático perro que debe luchar por sobrevivir hasta el regreso de sus dueños de un viaje. Ellos lo dejaron en una guardería canina donde nada es lo prometido. A las 20 se verá el documental “Pepo: la última oportunidad”, el filme dirigido por Cristian Jure y Juan Irigoyen sobre la vida del músico cumbiero Rubén Dario Castiñeiras, quien se reinserta en la sociedad tras estar en prisión por tener armas y drogas cuando era el líder de la banda Los Gedes. La última película anunciada es la comedia argentina de Martín Desalvo, “El padre de mis hijos”, sobre una mujer treintañera en crisis tras una ruptura romántica. Las dos últimas películas son para mayores de 13 años.