El intendente Germán Alfaro (Cambiemos) enfrenta hoy el primer paro sindical en su contra. “Hace más de dos años que no nos reciben en la intendencia. Si nos cierran el diálogo no nos queda otra alternativa que convocar a un paro que afectará las 26 reparticiones del municipio”, justificó Osvaldo Acosta, secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM). En la Intendencia rechazaron la medida de fuerza; la enmarcaron como una represalia del gobernador Juan Manzur contra el jefe vecinal y adelantaron que habrá descuentos salariales para quienes adhieran a la medida.
“He cometido el error, cuando nos habíamos manifestado adentro del municipio el año pasado, de no quedarme a acampar hasta que me reciba el intendente. Desde que asumió Alfaro que no nos reciben ni escuchan nuestros reclamos. Actuamos con mesura y prudencia, pero esto es el colmo”, recriminó Acosta.
En el sindicato municipal remarcaron que la medida de fuerza se produce por cuatro reclamos: la apertura de paritarias municipales; el ingreso de los hijos de los trabajadores a cargos en las reparticiones; la reimplementación de los códigos de descuentos por planillas para medicamentos y supermercados; y la creación de una mesa de diálogo para estudiar la implementación del 82% móvil jubilatorio.
“El paro se sentirá en muchas reparticiones a pesar del acto intimidatorio de la Municipalidad, que emitió una circular en donde informaba que se les descontará el día a los trabajadores que se plieguen a la medida”, renegó Acosta, quien agregó: “Hicieron circular por Whatsapp un mensaje anunciando represalias. Nos tienen miedo en el municipio porque reclamamos mejores condiciones de trabajo. Denunciamos persecución sindical”.
El secretario de Gobierno municipal, Walter Berarducci, despotricó contra el sindicalista, a quien tildó de ser una “herramienta del gobernador”. “Este no es un paro gremial ni sindical, es una medida netamente partidaria porque Acosta responde directamente al mandato del gobernador Manzur; es un esbirro, una herramienta para perjudicar a la gestión del intendente”, cuestionó.
En cuanto a los reclamos de SOEM, el funcionario insistió en que la Municipalidad cumple con las obligaciones fijadas por las normas, y explicó que prevén que la medida de fuerza no tenga alto impacto. “Los servicios municipales están garantizados. Los reclamos no tienen asidero, sustento ni peso para justificar una medida de fuerza, que sólo afectará a los vecinos y a los trabajadores que se plieguen, a quienes lamentablemente -y lo digo porque son compañeros míos- se les descontará el día no trabajado”, finalizó Berarducci.