El gobernador Juan Manzur dio un discurso que se extendió durante una hora en la apertura de las sesiones ordinarias en la Legislatura. Estas fueron las palabras del mandatario ante los 44 legisladores del recinto:
Señor presidente de la Honorable Legislatura, legisladores, autoridades civiles, judiciales, eclesiásticas y militares, señoras y señores, pueblo de Tucumán.
Gracias por invitarme nuevamente a cumplir con el mandato constitucional de dar cuenta de la acción de gobierno ante los representantes del pueblo.
Su realización confirma la plena vigencia de nuestro sistema democrático, y ello mismo es un motivo de alegría que no podemos soslayar.
Lo hago luego de un año en el que se realizaron elecciones en nuestro país. Un evento que también consagra el funcionamiento pleno de otra de las instituciones más caras de nuestro sistema político: la voluntad popular expresada a través del voto de cada uno de los ciudadanos.
Estas elecciones de medio término han confirmado de manera consistente y mayoritaria el apoyo popular a nuestra gestión de gobierno.
Igualmente, han mostrado resultados que a lo largo y ancho de todo el país apoyan gestiones de signo político distinto. Bienvenido sea. Ello es una señal de la fortaleza de nuestro sistema democrático y federal de organización, que incluye las diferencias políticas y permite la convivencia plural. La opinión del pueblo expresada en el voto ciudadano es la mayor expresión de la voluntad soberana de una sociedad. Respetarla y promoverla es parte de nuestras más profundas convicciones democráticas.
Ello es también una muestra de alta madurez cívica, que al mismo tiempo nos invita a redoblar nuestros esfuerzos como clase política y dirigente para priorizar el diálogo, el intercambio de opiniones y la negociación, a los fines de organizar nuestras miradas e intereses distintos.
Estas diferencias no constituyen ninguna división o grieta en nuestro país. Conforman sencillamente las diferencias de opiniones y perspectivas de cualquier país maduro y plural que se jacte de democrático.
Señores legisladores, las mayores diferencias que hay en nuestro país son aquellas que la tradición política a la que pertenezco viene señalando desde hace más de setenta años: las de la injusticia social y la desigualdad territorial. Estas son las grietas que, conjunta y organizadamente, debemos seguir cerrando con nuestro esfuerzo y accionar, para acompañar a los más postergados en una dirección distinta a la que las condiciones iniciales de su vida parece indicar.
Son aquellas diferencias que excluyen a los vulnerables de la vida social; postergan las esperanzas de miles de niños y jóvenes, adultos y ancianos de nuestra provincia y nuestro país; y reducen hasta la imposibilidad sus alternativas de educarse y trabajar. Esa grieta por la que hemos luchado y cerrado brechas mediante políticas que aún perduran y dignifican la vida de los trabajadores de nuestra nación. Esa grieta sobre la que el papa Francisco ha dicho recientemente que “con la exclusión queda afectada en su misma raíz la pertenencia a la sociedad en la que se vive, pues ya no se está abajo, en la periferia, o sin poder, sino que se está fuera”.
La otra diferencia sustantiva que desafía nuestra vida social es aquella de la desigualdad territorial, por la que el norte de nuestro país, desde el inicio mismo de nuestra vida independiente, sufre postergaciones e inequidades que claramente retrasan nuestra región y someten a sus ciudadanos a la desigualdad de oportunidades. Postergaciones que cualquier indicador económico, productivo o social confirma y evidencia. Desigualdades que los años de vida nacional e independiente no han eliminado, sino que, por el contrario, han incrementado.
Pero cualquiera de estos datos y realidades no nos amedrentan. Por el contrario, nos estimulan. Porque sabemos que las circunstancias del pasado generan condicionamientos a una sociedad, pero no determinan su porvenir. Estamos convencidos que el accionar conjunto de los distintos poderes del Estado; la confluencia y planificada de las políticas públicas; la integración del sector público y privado; la incorporación de la ciencia y la innovación tecnológica a la producción y el desarrollo, sabrán aprovechar las infinitas posibilidades de nuestra provincia. Y ello construirá los puentes necesarios para el crecimiento individual y colectivo de los tucumanos. Para ello hemos trabajado este año.
A los fines de confirmar claramente nuestro norte, hemos trabajado con la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) y el sistema de Naciones Unidas en la adecuación de nuestras metas estratégicas a la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible que los países del mundo han decidido y consensuado. En junio del 2017 hemos dialogado esta adaptación con más de cincuenta organizaciones de la sociedad civil y arribada a una nueva versión de los Lineamientos Estratégicos de la Provincia cuya edición impresa ustedes tendrán pronto en sus manos. Planificamos junto y acorde a los criterios que lo están haciendo los países del mundo.
En esta misma dirección, ya hemos comenzado a trabajar con municipios de la provincia en el diseño de sus propios planes de gestión, con vistas a la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Y nuestro próximo paso es convocar a la comunidad científica tucumana para que sumen su investigación y estudios en formas de proyectos en este camino común y colectivo.
Para el cumplimiento de todas estas metas, esta vinculación de nuestra provincia con el mundo es de suma importancia. Ni apertura ilimitada e ingenua, ni aislamiento comarcano estéril. Queremos ser activos, inteligentes y selectivos en nuestras relaciones, tomando de la experiencia internacional lo que pueda contribuir a nuestro desarrollo, a crear nuevas oportunidades para los tucumanos y a mejorar nuestra calidad de vida.
Por ello una de las cuestiones importantes en esta gestión de Gobierno ha sido construir para Tucumán una agenda para la proyección de nuestra provincia a la región y al mundo. Somos una provincia sin fronteras internacionales, mediterránea y con un pequeño territorio.
Por ese motivo el desafío es mayor aún. Proyectarse más allá de las fronteras de la Argentina nos ha exigido un esfuerzo importante que hemos tratado de compartir con nuestros empresarios, investigadores, científicos y referentes de la cultura y el deporte.
Ello no es una absoluta novedad para los tucumanos. Abrevamos en nuestra propia historia. Aquella que supo hacer de estas tierras un nodo regional de vinculación e intercambio entre la Sudamérica andina y profunda, y el puerto que se conectaba con el océano y el mundo. Intercambio de bienes y encuentro de culturas. Está escrito en nuestra más profunda tradición histórica.
Somos una sociedad que tiene energía creativa; una industria más que centenaria; universidades e institutos de investigación y desarrollo cuyo prestigio trasciende fronteras; artistas y hombres y mujeres de la cultura reconocidos en el mundo; un despliegue internacional de nuestra producción más competitiva que es el limón; figuras de las más diversas actividades que se destacan en el país y la región.
Como concreción de esta agenda internacional que nos hemos propuesto como política de gobierno, a lo largo de este tiempo hemos realizado misiones con empresarios a Chile, Brasil y Estados Unidos con los ejecutivos de la industria del limón para sostener la necesidad de que se abra ese importante mercado para la producción emblema de Tucumán. Esperamos que muy pronto sea posible ver la descarga allí de contenedores con nuestra fruta, que es una marca de la potencia emprendedora de nuestros empresarios, profesionales y trabajadores.
Visitamos los organismos multilaterales, agencias internacionales e instituciones de la sociedad civil llevando la palabra y presencia de Tucumán al Banco Interamericano de Desarrollo, al Banco Mundial, al Consejo de las Américas, al Instituto de Tecnología de California, y al Campus de la Universidad de California en San Diego.
Dos encuentros merecen una mención especial y deseo compartirlo con ustedes. Uno fue con Jerry Brown, Gobernador del Estado de California, que es actualmente la sexta economía del mundo. Con él firmamos un acuerdo de Entendimiento en materia de Liderazgo Mundial de Estados Provinciales ante el Cambio Climático. Esta es una iniciativa promovida por el Gobierno del Estado de California y de la que participan 206 estados locales en el mundo, de 43 países y 6 continentes. El segundo encuentro fue con el Dr. Luis Almagro, Secretario General de la Organización de los Estados Americanos, la OEA, que comprometió su visita a la provincia próximamente.
Pero además de ir a buscar al mundo en su propio lugar, hemos comenzado a abrir nuestras propias puertas de otra manera para que el mundo venga a Tucumán.
A lo largo de este año que ha pasado, aquello que en el discurso de 2017 les comentaba como un proyecto a realizarse, ya ha comenzado a concretarse. Tucumán ya está conectada con Buenos Aires y otras provincias con más de 70 frecuencias aéreas semanales. Y con países latinoamericanos, y el mundo a través de ellos, casi todos los días de la semana. Los tucumanos ya viajamos al mundo sin pasar antes por el Aeroparque Jorge Newbery o el aeropuerto de Ezeiza. Y a lo largo de este año estas frecuencias se incrementarán significativamente con nuevos destinos a otros países de la región.
Este accionar ha tenido resultados inmediatos. El movimiento de pasajeros registrados durante los meses de enero a mayo y de septiembre a noviembre de 2017 sumó un total de más de 490.000 pasajeros que arribaron y desembarcaron en el aeropuerto Benjamín Matienzo, un 14.6% superior al movimiento de pasajeros del 2016. Y durante los meses de septiembre a noviembre, con la incorporación de nuevos destinos nacionales e internacionales que les mencioné, se observó un incremento de 18% en el movimiento de pasajeros.
Esto muestra a las claras que esta política abre las puertas de nuestra provincia al mundo entero. Nos expone y desafía de una nueva manera, porque ello también significa que personas de diferentes países podrán llegar directamente hasta nuestras propias aduanas, visitar nuestros lugares históricos, gozar de nuestros paisajes y conocer nuestras culturas. Para ello nos estamos preparando. Tucumán ha comenzado su camino de constituirse en un destino de visita internacional, turístico y productivo, cultural y deportivo. Y les propongo que este sea un camino sin retorno.
Vivimos en un mundo de grandes interconexiones de inversiones, tecnologías, mercados y personas. Es un mundo altamente complejo, desafiante y muchas veces contradictorio. Pero es el mundo y el tiempo en el que transcurre la vida actual de los tucumanos, y es nuestro deber como Gobierno contribuir a que esa vida sea mejor. Aislarnos sólo nos condena a la pobreza y al subdesarrollo. Conectarnos significa aprovechar esta oportunidad para generarnos un mayor y mejor desarrollo social y colectivo.
La proyección internacional de Tucumán es un objetivo central de nuestra política pública como Gobierno, pero es también una tarea de todos los tucumanos. No es una acción que pueda realizar sólo el Gobernador. Antes que nada, señores legisladores, un trabajo conjunto entre ustedes y el Poder Ejecutivo que presido. Y además, una tarea de todos los actores de la sociedad que tienen que llevar Tucumán al mundo y traer del mundo aquellas experiencias, conocimientos o productos que puedan contribuir al desarrollo de la provincia.
Nuestro desarrollo económico, aquel que se logra a partir de la permanente creación de valor agregado y generación de empleo, depende esencialmente de nuestra capacidad de conexión a los mercados globales.
Para esta proyección de la provincia en el escenario global hemos desarrollado una visión integral. Por un lado, queremos aumentar el acceso a los mercados internacionales e impulsar la integración regional. Y, por el otro, incrementar la calidad de dicha inserción, generando diversificación y agregación de valor.
O sea, una inclusión en el sistema global que provea crecimiento, competitividad y sustentabilidad para el sector productivo a la vez que genere empleo, bienestar y calidad de vida para su población. Esta es la política de vinculación e integración de nuestra gestión, que contribuirá al norte de aquel desarrollo con equidad que les hablé al inicio de mi gestión.
Una cuestión primordial es construir una política de comunicación consistente con la estrategia de la inserción internacional de la provincia, alimentada por el conjunto de las capacidades y valores que cultiva en sus distintos ámbitos la sociedad tucumana
Otra prioridad que nos ocupa es hacer el seguimiento de las negociaciones internacionales del Gobierno Nacional con el fin de evaluar oportunidades o advertir eventuales perjuicios que puedan afectarnos a partir de nuevos acuerdos internacionales que se firmen. Todas las naciones, desde Estados Unidos o la Inglaterra liberal hasta nuestros cercanos vecinos, ejercen algún modo de protección y regulación para defender su estructura productiva.
Un tercer tema es la promoción de las inversiones, que a medida que transcurre el tiempo, es cada vez más sofisticada. Es necesario adoptar enfoques ajustados a tipos de industrias, países y empresas, buscando identificar socios adecuados que contribuyan al desarrollo del perfil productivo y social de la Provincia.
En este marco, adquiere particular relevancia el ejercicio de la Presidencia Pro-tempore del ZICOSUR. Esun proyecto integracionista, que reconoce como antecedente la existencia del Grupo Geicos, una alianza de sectores privados en los años 70 del siglo pasado, y que se relanzó con la decidida participación de Gobiernos locales de la región realizada en Antofagasta en el año 1997.
Hoy está conformada por 50 unidades regionales y estaduales pertenecientes a los países de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Perú. Tiene una población de más de 57 millones de habitantes, en un territorio de cuatro millones seiscientos mil kilómetros cuadrados, con exportaciones por ciento veintiún mil millones de dólares. Hemos trabajado de modo muy articulado con los embajadores argentinos en los países cuyos estados provinciales conforman este sistema y estamos en camino de fortalecer esa alianza para la integración que une el Atlántico con el Pacífico a la altura del Trópico de Capricornio. Recientemente se han sumado el Estado de Paraná de Brasil y la provincia de Córdoba, y próximamente lo hará Río Grande do Sul de Brasil.
En este contexto, el rol de los estados provinciales es cada vez más trascendente. Tanto las exigencias del entorno global como las propias dinámicas del acontecer regional conducen a privilegiar la construcción de espacios amplios e interconectados de cooperación regional y de gestación de masas críticas en materia de financiamiento, tecnologías y recursos humanos, así́ como la convergencia en aspectos claves de las políticas públicas.
En ese sentido estamos promoviendo acciones de Cooperación Técnica Internacional que favorezcan el intercambio y las alianzas estratégicas con países centrales y de la región, en temas de mejoras productivas, medio ambiente, turismo, cultura, y en todas aquellas áreas que sean de prioridad para el desarrollo regional, en la que aspiramos que la provincia sea protagonista de ese proceso.
Ustedes saben la significación que tienen los costos logísticos para alcanzar niveles de competitividad global. Por eso estamos trabajando en coordinar los esfuerzos productivos, de transporte y distribución para optimizar la capacidad de producción del Norte argentino, Paraguay, Sur de Bolivia, Sudoeste de Brasil y Norte de Chile, principalmente a través de los Corredores Bioceánicos y aprovechando los puertos de las regiones chilenas, para conducirlas hacia los mercados del Asia-Pacífico. Nuestro accionar busca expandir y diversificar nuestro comercio, facilitando contactos entre productores y comercializadores de la región con compradores internacionales, especialmente ribereños del Océano Pacífico.
En esta visión, el rol que juegan los empresarios tucumanos en la proyección de la provincia es decisivo. Tucumán, siendo la provincia más pequeña del país, exporta bienes y servicios a más de 150 países.
Es una muestra de vocación emprendedora y capacidad para producir, innovar y competir en los mercados más exigentes. Esto es un atributo de nuestra sociedad y es compromiso de nuestro Gobierno apuntalar y apoyar cada uno de los proyectos destinados a incrementar nuestras exportaciones. Y en este mismo camino tenemos que apuntalar lo que denominamos sistema de innovación.
Por ello nuestros equipos técnicos coordinaron durante el año 2017, la participación en eventos internacionales, los cuales incluyeron 27 ferias comerciales internacionales, nacionales y locales. De estos encuentros participaron 80 empresas de la provincia, en tanto fueron 72 las que intervinieron en las misiones comerciales que se desarrollaron en Brasil, en México y en Chile.
En total, fueron más de 150 las compañías tucumanas, de diversos sectores de la economía, que, mediante ferias y misiones comerciales, buscaron oportunidades de negocios en mercados del exterior.
El crecimiento económico de los países está íntimamente ligado a la tasa de innovación tecnológica. El conocimiento es el motor central de crecimiento económico.
Los países que han logrado tasas de crecimiento importantes han experimentado una reestructuración de sus aparatos productivos, en los cuales se hace uso de tecnologías más eficientes en sus procesos al mismo tiempo que se incrementa la variedad de productos. Todo esto no sólo genera un gran impacto en los mercados nacionales, sino que permite una mayor competitividad en los mercados internacionales.
Por ello también es que a lo largo de este año que pasó, hemos asistido y facilitado la capacitación de nuestros investigadores, técnicos y emprendedores en la identificación y presentación para fuentes de financiamiento de sus tareas e innovaciones. También hemos participado en la generación de proyectos específicos a ser subsidiados en las áreas de salud, turismo, medio ambiente y transferencias de tecnologías.
Tucumán se inscribe entre las provincias que han alcanzado importantes niveles de innovación y competitividad internacional. La agroindustria del limón; la producción de arándanos; las industrias metalúrgicas y la textil; y la producción de software, son algunos de los destacados ejemplos de competitividad que nuestros empresarios, con riesgo e inversión, han alcanzado junto a quienes han desarrollado servicios de logística y transporte. Ello nos ubica en un excelente lugar para afrontar los desafíos de un crecimiento económico con inclusión social efectiva, a través de la creación de empleo y la capacitación permanente de nuestros recursos humanos.
Sin duda que esta capacidad creativa y energías productivas de los tucumanos se moviliza en un contexto macroeconómico nacional e internacional difícil y de alta complejidad, que privilegia la actividad financiera por sobre la productiva y la especulación a la creación de valor agregado y generación de empleo, con serias consecuencias sobre la desigualdad e inequidad entre países y entre personas, como lo ha denunciado el Papa Francisco en sus encíclicas.
Nosotros apostamos a un modelo exactamente opuesto. A un modelo que privilegie la producción y la generación de trabajo por sobre la especulación financiera y a políticas públicas activas que ayuden a agregar valor y a fortalecer la empleabilidad. De esto se trata el camino para el desarrollo con equidad. Y Tucumán tiene reservas, un presente dinámico y mucho potencial para insertarse y beneficiarse de esta manera en la que venimos hablando.
Esta vinculación entre conocimiento, innovación tecnológica y desarrollo productivo no es nueva para los tucumanos. Es parte de una visión que hunde sus raíces en nuestra historia. Los industriales tucumanos fundaron la industria más moderna en su tiempo incorporando las calderas a vapor y la tecnología más avanzada en los albores de nuestra industria azucarera. Los gobernantes de entonces consiguieron la llegada del ferrocarril de trocha ancha a Tucumán. Don Alfredo Guzmán fundó la Estación Experimental e incorporó a la dirección de la misma al Ingeniero William Cross. Juan B Terán, fundador de la Universidad de Tucumán, y el Rector Horacio Descole, invitaron en su momento a profesores europeos para enriquecer la formación de los jóvenes estudiantes universitarios tucumanos. La articulación de la dirigencia política y empresaria de la provincia con el mundo, es parte del ADN tucumano.
Precisamente este es el motivo por el que acordamos con un ilustre arquitecto tucumano de renombre mundial el proyecto para un nuevo Centro Cívico para Tucumán. César Pelli no sólo es un gran arquitecto, sino que su nombre genera atractivo y prestigio por la calidad y magnitud cierta de sus obras principales y de mayor envergadura. Pensamos que un Centro Cívico proyectado por un gran arquitecto es un aporte trascendente para fortalecer la imagen y la identidad de Tucumán hoy.
Así también pensamos que Tucumán debe retroalimentarse de los saberes y capacidades existentes en otros países. Eso explica que enviemos maestros a interactuar y capacitarse en Estados Unidos; un grupo de jóvenes músicos a formarse en Israel y en Francia o una delegación de miembros de nuestros pueblos originarios a Machu Pichu y Cuzco. Allí van a conocer cómo se organizan los servicios turísticos y la producción artesanal de nuestras ruinas de Quilmes, que son el conjunto arqueológico más importante al sur del Perú. Como ustedes lo saben, esta interacción y nuestra decisión política son las que han permitido que recientemente pudiéramos abrir el Centro de Interpretación en esta Ciudad Sagrada de nuestra provincia, que durante la temporada estival recibe casi 900 turistas por día.
Otro tema que nos proyecta con fuerza a la región es nuestro deporte. Esto requiere de los escenarios adecuados y es por eso que hemos iniciado estudios y análisis para ver la factibilidad de proyectar y construir un gran complejo deportivo de nivel internacional que tenga los atributos propios para ser sede de competencias internacionales. Entendemos que contar con el escenario capaz de convocar multitudes, atraer público de la región y proyectar nuestra imagen al exterior es una obra de valor para la provincia.
Estimados legisladores, estos son los ejes y motivos de nuestro accionar en esta política pública que entiende como conveniente la proyección de Tucumán en el mundo. La mejora presente del bienestar y la vida diaria de nuestra gente, está plenamente vinculada con nuestra capacidad de articular energías con la globalización que existe y nos interpela y desafía todos los días. Esta proyección internacional debe ser una política de estado para los tucumanos. Estoy comprometido a sostenerla, consolidarla y los invito a que trabajemos juntos en ello.
A los fines de consolidar nuestro desarrollo productivo, hemos llevado adelante una agresiva política de integración entre el sector público y el privado buscando agregado de valor y generación de nuevas fuentes de trabajo
Uno de esos desarrollos a destacar es la Ley Pecuaria, sancionada por esta legislatura, que significa una serie de beneficios muy importantes para el sector teniendo en cuenta el volumen importantísimo que tiene en la provincia la importación de productos como carne de vaca, pollo, huevos y lácteos.
En una misma dirección favorable debemos señalar la estrategia que se llevó desde el gobierno con respecto al sector cañero. Ello significó una mejora muy importante en el precio del azúcar como gran redistribuidor de la riqueza en la provincia, sobre todo en beneficio del pequeño y mediano cañero.
Como es de público conocimiento, en relación a esta actividad hemos sostenido una acción decidida y enérgica en su favor, frente a prohibiciones de venta de azúcar que se realizara en el municipio de una provincia de nuestro país, sin que se acreditara ningún criterio sanitario cierto para ello. Este accionar tuvo como respuesta una decisión favorable de la Justicia.
Hemos promocionado actividades promisorias en la provincia como la vitivinicultura, que ya ha comenzado a ser una referencia en la producción del noroeste argentino.
Un dato de especial relevancia lo constituye el volumen de exportaciones de la provincia, que han superado en el período 2016-2017 la marca histórica de los mil millones de dólares. Esta es la dirección de nuestra inserción en el mundo de la que venimos hablando.
Uno de las decisiones políticas que favoreció este crecimiento ha sido el tratamiento impositivo diferencial para todos los pequeños productores con alícuota cero en los ingresos brutos.
Estamos promoviendo la participación en el Programa Probiomasa, destinado al desarrollo de proyectos relacionados con la generación de energía a partir de la biomasa procedente de diferentes Residuos Agrícolas (RAC) en particular, caña de azúcar y citrus, con las perspectivas de conformar mecanismos y herramientas económicas y técnicamente aptas para el diseño, construcción y gestión de la cogeneración. El objetivo es desarrollar proyectos vinculados a la cogeneración de energía eléctrica a partir de biomasa.
En particular, estamos trabajando para promover las inversiones en el sector sucroalcoholero tendientes a la cogeneración eléctrica y la eliminación de la vinaza como contaminante. Igualmente, estamos evaluando el avance de proyectos que buscan generar energía a partir de la vinaza.
Junto a la energía, la conectividad de los distintos medios de distribución es central para la llegada y salida de bienes y productos. Nuestra visión es la consolidación de la posición de Tucumán como un nodo logístico regional, y la estación multimodal carga de Cevil Pozo es la acción concreta que dará lugar a ello. Para su realización, ya se han expropiado los terrenos correspondientes y seguimos trabajando en este proyecto.
En un contexto nacional difícil, la actividad productiva de la provincia y las políticas públicas emprendidas en este sentido han influido favorablemente en un tema central para el bienestar de los tucumanos: el empleo. Tucumán logró mantener equilibrado a lo largo del año la tasa de desempleo, mientras esta creció en casi un uno por ciento en el promedio del país.
Otro indicador de carácter similar ha sido el vinculado al empleo mismo, el cual ha crecido en un 2,5% a lo largo del año 2017 en nuestra provincia. Dentro de este porcentaje, el empleo en el sector privado ha sido del 3,5% en el mismo período. Este valor ha hecho que nuestra provincia lidere el crecimiento en este indicador social entre las 24 jurisdicciones de Argentina. Dado el contexto general de la situación económica nacional, este dato muestra que la actividad económica se ha sostenido en la provincia, manteniendo y acrecentando las fuentes de trabajo.
En este contexto, no puedo dejar de mencionar una fortaleza de nuestra provincia, vinculada a su crecimiento demográfico. Nuestra pirámide poblacional, ancha en su base, nos promete un futuro generacional relevante, superior al de muchos países desarrollados del mundo.
Esta proyección internacional y el crecimiento productivo que avizoramos para Tucumán, como parte de aquel desarrollo con equidad que les hablé al inicio de mi gestión, no serán posibles sin estos niños y jóvenes preparados para ello. Ellos constituyen nuestro hoy y mañana como sociedad, una razón primordial de nuestras políticas públicas.
En este sentido, vuelvo a reafirmar lo que manifesté en mi discurso inaugural: la defensa de la vida desde la concepción, como establece nuestra Constitución.
Con la visión puesta en el mañana de nuestros niños y jóvenes, hemos cumplido con una meta relevante que nos habíamos propuesto: los 180 días de clase. Que nuestros alumnos estén en el aula dentro de este tiempo establecido es una condición mínima fundamental para muchas otras políticas educativas.
Así también, hemos ampliado el tiempo de aprendizaje en un 37%. Esto lo hemos realizado con más de 50 propuestas pedagógicas extraescolares para 1.700 escuelas, 20.000 estudiantes y 3.500 docentes.
Estamos convencidos que esta es una de las principales inversiones para el Tucumán con el que soñamos. Por ello hemos tomado la firme decisión de incrementar nuestra inversión en educación, lo que tuvo un aumento del 21% en el año que pasó. Ustedes, señores legisladores, han sido fundamentales en esta decisión.
Los resultados de la tarea están a la vista en más de un indicador educativo. La tasa de escolarización para la sala de 3 años se incrementó en un 27% y la de niños de 4 años es del 87,1%. Se crearon 11 escuelas de nivel inicial, que alcanzan un total de 48 secciones de Jardín de Infantes.
Seguimos ejecutando obras de infraestructura y equipamientos para nuestras escuelas.
En el nivel primario la tasa de escolarización alcanzó casi un 99%, garantizando el derecho a la educación de los niños en mejores condiciones pedagógicas e institucionales.
En el nivel secundario se ha producido la disminución de la tasa de abandono en diez departamentos de nuestra provincia, y esperamos que ello continúe en 2018 a partir de los nuevos formatos y organización escolar que diseñamos para la Nueva Escuela Secundaria. La promoción efectiva mejoró también en otros tantos departamentos de la provincia.
La Nueva Escuela secundaria se ha iniciado en 16 escuelas provinciales, y tiene por objeto promover la permanencia en el ciclo secundario, y el acompañamiento y apoyo a los trayectos escolares, en pos de garantizar la ciudadanía plena de los jóvenes de la provincia.
Un proyecto de especial valor social es el de Escuelas Secundarias Rurales mediadas por Tecnologías de la Información y Comunicación, para que adolescentes de lugares rurales puedan, a través de entornos virtuales y otras tecnologías, contactarse con docentes y profesores de escuelas mayores.
La jerarquización del maestro es una de nuestras principales preocupaciones, porque allí está el núcleo central del proceso de aprendizaje. A través de diversas acciones de capacitación se busca profundizar, actualizar y enriquecer la formación pedagógica-didáctica, incorporando metodologías y recursos de enseñanza, integrando las tecnologías a la formación docente. Además de impulsar la presencia de docentes tucumanos en otros países, hemos creado el programa FORMAR, que ya cuenta con 150 propuestas formativas de excelencia y calidad, con modalidad presencial, semipresencial y a distancia.
No necesito decirles a ustedes la relevancia de las políticas de salud en la meta final de cumplir con nuestro anhelo de desarrollo en equidad. La atención de la salud señala más de un indicador de bienestar de nuestra población, al tiempo que asegura las posibilidades de que tal bienestar se sostenga en el tiempo. Y en esta dirección hemos caminado a lo largo del año que pasó.
Durante el año 2017, más de 600.000 personas fueron asistidas, en una o más oportunidades, por el sistema público de salud. O sea, el 40% de los tucumanos. En este tiempo se registraron más de 16.000 nacimientos en el sistema público de salud, lo que representa el 60% de los nacimientos realizados en la provincia. Se realizaron 10 millones de prestaciones ambulatorias y se asistieron casi 6 millones de consultas, de las cuales 1.200.000 fueron en los hospitales de referencia y 4.500.000 en la red de atención primaria. Se realizaron 47.000 cirugías, muchas de las cuales no se realizaban hasta ahora en la provincia.
No puedo dejar de destacar algo que es motivo de orgullo para nuestras políticas públicas. Esto es que seguimos brindando a la población un servicio de alta complejidad como son los trasplantes de órganos. Ello constituye un claro ejemplo de la disposición de todos los servicios del Estado para toda la población, en particular en beneficio de aquellos que no podrían acceder al mismo por su propia cuenta.
Hemos sostenido el eje de trabajo en la prevención de enfermedades transmisibles y no transmisibles, y logramos bloquear brotes epidémicos como el Dengue, Zika, Chikunguya, Sarampión y Rabia, entre otras.
Todo ello se llevó a cabo desde los centros asistenciales de salud y la participación de 930 agentes sanitarios, que actúan como nexo primordial entre la comunidad y el centro de salud. Este año se realizaron casi 300.000 visitas a casas de familia y más de 500 operativos en territorio para lograr las medidas preventivas necesarias.
En el año 2017 tuvimos la epidemia de bronquiolitis más severa de los últimos años, para lo cual desarrollamos una estrategia de asistencia coordinada y logramos que la epidemia no incremente la tasa de mortalidad por esta causa.
Tucumán se destaca por brindar la mayor y mejor cobertura de vacunación del país. En total, se han aplicado 1.100.000 dosis de vacunas. Habiendo logrado una cobertura de vacunación antigripal récord en embarazadas del 99,9% y del 80% en niños de 6 a 24 meses.
En relación a la provisión de medicamentos y leche, nuestra provincia ha garantizado el suministro del 100% de los mismos. Este es uno de los más de 40 programas destinados a la prevención, promoción y asistencia de los ciudadanos, a través de estrategias específicas de cada área, asegurando la detección precoz y el tratamiento oportuno.
Este conjunto integrado y coordinado de acciones ha permitido impactar sobre indicadores claves, que continúan mostrando mejoras sostenibles en la provincia. Uno de ellos es el de mortalidad materna, que alcanzó un 2.8 por diez mil en el 2016 y es inferior a la media nacional del 3.4 por diez mil. Algo similar sucede con los índices de Mortalidad Infantil, donde el 11 por mil de la provincia está cada vez más cerca del casi 10 por mil de la Nación. Esto muestra que en el contexto de las 24 provincias de nuestro país, que marcan el escenario general de nuestras posibilidades, las políticas públicas sostenidas con cuidado y atención a lo largo del tiempo van produciendo resultados y mostrando su eficiencia.
Las tareas que acabo de mencionar se conjugan y coordinan con todas aquellas políticas sociales que hemos sostenido a lo largo del año que pasó. En materia de alimentación hemos proporcionado el desayuno enriquecido con probiótico y almuerzo a casi 220.000 alumnos de nuestras escuelas. A través del sistema de tarjeta social y de los módulos alimentarios hemos cuidado a casi 60.000 familias de todo Tucumán. Nuestras tareas de cuidado se han extendido a miles de otros tucumanos en todo el territorio de la provincia, con una particular atención a personas en situación de adicción; a mujeres que sufren situación de violencia y riesgo sanitarios y a niños y adolescentes en nuestros centros de protección, promoción y prevención. Igualmente, hemos puesto un esmero especial en la atención a nuestros discapacitados, a los jóvenes y a los adultos mayores.
De manera similar hemos avanzado con el fortalecimiento de las políticas de empleabilidad, que nos permiten apoyar a emprendedores individuales y asociados, a los fines de promover sus capacidades y habilidades para insertarse laboralmente o desarrollar sus propias actividades.
Este conjunto de políticas productivas, educativas, sanitarias y sociales han colaborado de manera relevante para que los indicadores de pobreza e indigencia hayan descendido entre el segundo semestre del 2016 y el primero del 2017. Acorde a las mediciones del INDEC, la línea de pobreza en nuestra provincia descendió casi tres puntos, en tanto la de indigencia cayó del 3,1% al 2,3%.
Sin duda que aspiramos a mejorar estos indicadores, y la tarea que aún resta es ardua y compleja. Pero nos muestra que el camino y las decisiones elegidas han producido resultados positivos. El cuidado de los vulnerables y los más necesitados es prioridad absoluta de nuestras políticas públicas.
El bienestar de los tucumanos requiere de una atención cuidadosa también de aquellos bienes intangibles que contribuyen a su desarrollo pleno y completo. Como todos sabemos Tucumán posee un capital cultural y artístico muy valioso, que hunde sus raíces en su historia y que a largo de ella, a través de la producción intelectual y artística de sus hombres y mujeres, hizo que se constituya naturalmente como polo cultural de la región NOA.
Todo esto hace de Tucumán una provincia con una intensa actividad artística y cultural que se expresa en una constante producción por parte de sus numerosos músicos, escritores, actores, plásticos, cineastas, editores y diseñadores.
Este año hemos continuado con las políticas y acciones culturales que venimos instrumentando sostenidamente y que tienen como objetivo impulsar la participación de todos sus sectores sociales y regiones. Quiero destacar el éxito del Festival Tucumán Cine y del Septiembre musical en sus pasadas ediciones que ya constituyen una marca registrada de nuestra provincia.
Al mismo tiempo, quiero anunciar que en este año la Feria Regional del Libro “Norte Grande”, que se realiza todos los años en el marco del Mayo de las Letras y que tiene como objetivo visibilizar la creación literaria e intelectual de nuestra región, se realizará en el espacio de la plaza Urquiza para generar un evento cultural de gran impacto público y carácter multiexpresivo que sirva para el regocijo de los tucumanos.
Un tema particularmente sensible y que afecta a la vida diaria de los tucumanos es el de la seguridad. Por ello y con el afán de renovar nuestros esfuerzos en esta tarea, en los primeros días del mes de diciembre de 2017, he decidido concretar una intención que desde hace tiempo veníamos estudiando, cual fue la creación del Ministerio de Seguridad. Entendemos que la complejidad y sensibilidad de esta problemática requería un tratamiento exclusivo y una atención distintiva y especial.
De este modo, con el nuevo Ministerio, hemos puesto en funcionamiento un Plan Estratégico de Seguridad de Aplicación Inmediata. Con acciones fundadas en la prevención, se logró sortear, un mes crítico como diciembre, sin mayores sobresaltos para los tucumanos. Esta operatividad se extendió en el verano a las principales villas turísticas de la provincia y municipios del interior.
Una de las facetas de este Plan es el permanente análisis delictual con el fin de focalizar zonas rojas y dirigir acciones urgentes para contrarrestarlas. Por otro lado, prevé fortalecer los lazos de confianza y participación ciudadana en los sectores más postergados de la sociedad, mediante sostenidos esquemas de policía de aproximación vecinal y comunitaria.
Asimismo, para su implementación, el Ministerio viene conformando una fluida comunicación y coordinación con la Justicia, la Legislatura, autoridades municipales y comunales, los medios de prensa, buscando el abordaje integral para resolver las situaciones más acuciantes en materia de seguridad.
Sobre la base de diagnósticos permanentes, el plan considera tres ejes de acción inmediata y sostenida en el tiempo.
El primero de ellos es la recuperación de la seguridad pública, consistente en la articulación operativa de medidas de impacto y saturación que repercutan en el ambiente delictivo, disminuyendo las posibilidades de cometer ilícitos.
El segundo es el fortalecimiento sostenido de la seguridad pública, mediante el trabajo directo en los barrios vulnerables y aquellos factores que potencian el delito, especialmente en los jóvenes desde temprana edad.
Y el tercer eje es la modernización de la Policía de Tucumán, a fin de mejorar la misma en sus recursos humanos, capacitación, organización, funcionamiento, legislación, infraestructura y equipamiento global.
Un trabajo similar está previsto en el sistema carcelario y a la seguridad vial.
Como les he manifestado en ocasiones anteriores, seguiremos siendo implacables con el delito en todas sus formas. Seremos inflexibles en el cumplimiento de los protocolos y de las normas establecidas a este efecto.
Agradezco de manera particular a la institución policial de la provincia de Tucumán, y a cada uno de sus mujeres y hombres, que cotidianamente arriesgan y ponen en peligro su vida para proteger a los ciudadanos de la provincia.
Nuestro Tucumán no está conformado sólo por el Estado Provincial, sino por municipios y comunas rurales que, conjunta y coordinadamente, trabajan de manera mancomunada por el crecimiento de la provincia.
En los primeros meses del año que pasó, fenómenos naturales castigaron fuertemente a la provincia, que causaron numerosos desastres en algunas localidades. Allí trabajamos conjuntamente distintos ministerios y áreas de gobiernos de la provincia y municipios, para dar contención a los cientos de familias afectadas y realizar un trabajo mancomunado para dar soluciones inmediatas e iniciar una tarea minuciosa de reconstrucción de pueblos afectados y cientos de kilómetros destruidos por estos fenómenos naturales. Dimos prioridad exclusiva a la tarea de reforzar y encauzar nuevamente aquellos ríos y canales que salieron de su cauce natural, volcando todos los esfuerzos, maquinarias y mano de obra disponibles para esta labor. Con las tareas realizadas de manera especial sobre la masa de agua del río Singuil y otros más de la cuenca hidrográfica, se benefició a aproximadamente 130.000 tucumanos afectados y pobladores de las localidades del sur de la provincia.
Hemos trabajado igualmente en el mejoramiento de los caminos de toda la provincia, tanto secundarios como principales. Esta tarea de reconstrucción y arreglos en comunas y municipios permitió la mejora y recuperación de casi 1.700 kilómetros de caminos y un total de más de 250 obras viales.
Sin duda que no hemos podido financiar todas las obras que deseábamos. Sin embargo, hemos podido trabajar en lo imprescindible.
Toda esta tarea no podríamos haberla realizado sin el sustento de una economía sana y sólida. Para ello hemos mantenido el equilibrio fiscal y no hemos producido ningún endeudamiento externo de la provincia. En el actual contexto nacional en el que nos desenvolvemos, ello conforma un logro de relevancia.
De manera similar, hemos mantenido el empleo estatal y defendimos la fuente de trabajo. Lo hemos hecho de una manera muy concreta, a través del sostenimiento del salario de los trabajadores mediante paritarias consensuadas, fieles a la tradición política a la que pertenecemos, que respeta la participación y la voz de los trabajadores.
Igualmente hemos trabajado y arribado a un acuerdo con los contratistas del Estado, habiendo logrado la regularización y ordenamiento de esa situación.
Para este año mantendremos el equilibrio fiscal y evaluaremos la posibilidad de acudir al financiamiento internacional para aquellas obras públicas de importancia estratégica
El fortalecimiento de nuestro accionar requiere de un Estado sólido e innovador, alerta e inteligente, capaz de implementar, medir y evaluar sus políticas públicas, acorde al mejor bienestar de nuestros ciudadanos. Por ello celebramos avances de fortalecimiento interno realizados por muchas áreas del Estado, como nuestra propia Fiscalía y el servicio del 911, que han avanzado en la certificación de normas de calidad, mejorando de este modo su gestión y exponiendo sus procedimientos a estándares internacionales de trabajo.
En esta dirección también se ha consolidado el Sistema Estadístico Provincial, que ya ha organizado y generado casi 400 indicadores provinciales, y los ha puesto a disposición de toda la ciudadanía. Este año se han sumado municipios y las cuatro universidades provinciales a este esfuerzo de mayor y mejor información en la gestión pública.
Como parte de esta tarea de consolidación de la información, les anuncio que a partir de este año, comenzaremos a tener nuestra propia medición provincial del índice inflacionario. Ello es un avance significativo para la mejora de nuestros indicadores y estadísticas.
A lo largo del año que pasó hemos cerrado algunas tareas de la celebración del Bicentenario que habíamos iniciado en 2016 y que, por sus características, requerían un tiempo mayor de trabajo y conclusión. Cada uno de ustedes tiene en su escritorio el Libro del Bicentenario, “Juntarnos”, con las imágenes y recuerdos de aquellos días tan especialmente vividos y que ya son parte de una historia común e inolvidable.
Igualmente, ya están en el edificio de esta Legislatura, para ser entregados a ustedes desde el día de mañana, otras dos publicaciones que son un producto de aquella celebración. Una es la publicación de las Historias de Tucumán, conformada por dos colecciones, las Historias de los Municipios y las Historias Temáticas. Una obra de 30 volúmenes, realizado por investigadores de nuestras universidades y del CONICET, que no tiene antecedentes en nuestro país. Y la otra publicación son los dos tomos de “Los Desafíos del Bicentenario”, que contienen todas las exposiciones de los expertos internacionales y nacionales que nos honraron con su presencia en los cuatros coloquios de aquel inolvidable año del Bicentenario.
Señores legisladores, como les he manifestado a lo largo de estos minutos, gran parte de esta tarea es el producto no sólo de coordinación interna de nuestras áreas del Poder Ejecutivo, sino también de la articulación y consenso con esta Honorable Legislatura y en particular de su Presidente y compañero de fórmula, Osvaldo Jaldo.
Entre todos estamos construyendo un Tucumán que ha comenzado a interactuar y proyectar al mundo; que está desarrollando acciones que fortalezcan la producción y se favorezcan de la innovación tecnológica y científica; que está llevando adelante políticas activas que buscan cerrar brechas y aumentar el bienestar de los tucumanos.
Estamos convencidos de que esta es la mejor estrategia para la consecución de nuestros objetivos y para esta meta particularmente ambiciosa de poner a Tucumán en contacto y relación, a los fines de generar una nueva versión de nuestro crecimiento y desarrollo. Sector público y privado; los distintos poderes del Estado; la ciencia, la tecnología y la producción; investigadores, innovadores y emprendedores; todos y cada uno puede y debe aportar a esta mirada y a esta nueva etapa que les propongo emprender. Una mirada y una etapa que quieren incursionar en caminos y senderos aún no explorados, pero que al mismo tiempo lo hace desde una historia y tradición en la que cada una de esas actividades han aportado y sumado al Tucumán que ya es y que tiene sus capacidades despiertas y listas para el desafío que ello supone.
Los invito a que continuemos en esa línea de trabajo conjunto. Los invito a que nos sumemos a esa historia de desarrollo y proyección que encararon nuestros padres del Centenario. Los invito a consolidar un proyecto renovador de los destinos de la provincia como generación del Bicentenario. Esa generación a quien la Providencia puso en este tiempo y este lugar, frente a los complejos desafíos de la época, para transformarlos en mejores oportunidades para cada uno de aquellos tucumanos a quien nos toca representar y servir.
Señores legisladores, los invito a protagonizar conjuntamente este tiempo de esperanza para la provincia. Y a escribir esta historia cuya letra depende exclusivamente de nuestra tarea conjunta y colectiva.
Los tucumanos de hoy y de mañana nos esperan.
Y estoy convencido que Dios nos dará las luces y las fuerzas necesarias para ello.