El programa nacional de ingreso social con trabajo “Argentina Trabaja” sufrirá nuevamente modificaciones. No cambiará, sin embargo, la situación de los 30.000 tucumanos que forman parte de él, que seguirán percibiendo los beneficios como hasta ahora. La Nación hizo este anuncio a los funcionarios locales. El subsecretario a cargo de la Unidad Ejecutora de Programas y Proyectos Sociales del Ministerio de Desarrollo Social, Guillermo Socolsky, adelantó que durante la mañana del miércoles se reunirá con el secretario de Economía Social de la cartera nacional, Matías Kelly, para conocer los detalles.
“La decisión fue unitaleral. De acuerdo con la resolución, cambiará el nombre del programa (pasará a llamarse ‘Hacemos Futuro’) y tendrá como obligación terminar los estudios y la formación en oficios. Como siempre dicen tanto el gobernador (Juan Manzur) como el ministro (Gabriel Yedlin), si es bueno para los titulares y para Tucumán, lo celebraremos”, consignó el funcionario.
Según trascendió en el ámbito nacional, serían suprimidas las tareas sociocomunitarias que hacían los beneficiarios, como el arreglo de iglesias y comedores, o la construcción de veredas. La Anses tendría participación mediante la actualización de datos anuales.
Socolsky recordó que el programa, que incluye el “Argentina Trabaja” y el “Ellas Hacen”, contiene a 30.000 ciudadanos distribuidos en tres unidades ejecutoras estatales y dos civiles. Se trata de las que funcionan en la Provincia, y los municipios de la Capital y de Yerba Buena, por un lado. Y las que están bajo la órbita de las fundaciones León y del Bicentenario (que preside el radical Jorge Mendía), por el otro.
Los titulares perciben alrededor de $ 4.500 mensuales, dependiendo del presentismo. Hasta el momento, el deber de concluir la educación estaba previsto sólo en el “Ellas Hacen”, que tiene como protagonistas a mujeres en situación de vulnerabilidad social.
Desde que fueron creados, los programas “Argentina Trabaja” (2009) y “Ellas Hacen” (2013) se modificaron en múltiples oportunidades. Habían sido puestos en marcha en 2009, tras la derrota del kirchnerismo en las elecciones legislativas. Tucumán fue la primera provincia beneficiada, con 250 cooperativas (contuvo inicialmente a 15.000 habitantes de municipios y comunas del Gran San Miguel). Los grupos fueron armados por dirigentes que respondían a concejales, legisladores e intendentes.
En una primera etapa, la mayoría de las cuadrillas se ocuparon, principalmente, de la limpieza de calles o de pequeñas obras. Hubo otras que desarrollaron talleres de herrería o de bloques. El objetivo original de la iniciativa era que la capacitación y la contención social derivaran en la formación de pequeñas empresas tras un determinado plazo. En 2012, la Nación anunció cambios para limitar el uso político.
El “Ellas Hacen” fue una ampliación del “Argentina Trabaja”. El objetivo de aquel es asistir a mujeres que perciben la Asignación Universal para que concluyan sus estudios y aprendan un oficio. Los buenos resultados en Tucumán habían sido resaltados por la Nación.
En 2015, una de las primeras gestiones de Yedlin fue requerir que se prorrogara la vigencia de la ayuda por la situación económica y social. Luego, el plan dejó de instrumentarse mediante cooperativas. Un año después, el Gobierno de Cambiemos descentralizó el manejo y habilitó a dos municipios -afines políticamente- a contar con beneficiarios. Se crearon, además, polos productivos en los municipios, de cinco talleres (carpintería y viveros, entre otros). Después, sumaron a las organizaciones sociales. El año pasado, la Provincia advirtió que estaban llegando menos recursos para mantener la iniciativa. A principios de enero, 400 beneficiarios denunciaron que no habían percibido la ayuda social anunciada para diciembre. La Nación se comprometió a regularizar la situación.