19 Febrero 2018
LA OBRA. Una historia contada con distintos recursos escénicos. la gaceta / (archivo)
A partir de las 17 se repondrá el espectáculo “Tina, el rumor de una nación” en el espacio de Laprida y San Martín.
La obra dirigida por Leandro Panetta tendrá funciones de martes a viernes, a las 15, 17 y 19, los sábados a las 19 y 21, y los domingos a las 18 y 29.
El musical, estrenado en julio de 2016, cuenta la historia de la Declaración de la Independencia, pero de un modo distinto: con la colaboración del arte, de la música y de la tecnología, en tiempos del Bicentenario.
“Tina” tiene dos actores en vivo y otros filmados y convocados a la escena con técnicas de holograma; del drama participan cerca de 50 personajes, con una dinámica en vivo promovida por una sola pareja actoral.
Durante 50 minutos y sobre una plataforma giratoria ubicada en el hall central y sobre la que se encuentra el centenar de las butacas, el público recorre seis escenarios dispuestos en los arcos laterales del centenario edificio que alojó al Banco Provincia: el interior de la Casa Histórica (el salón de la jura), el Cabildo de Buenos Aires, la Posta de Yatasto, una biblioteca, la tienda de campaña de San Martín y los Valles Calchaquíes con sus menhires.
Por momentos, el público se ve enfrentado a tres escenarios simultáneamente o a todos, como en el final, donde deberá optar qué ver. Aunque cómodamente sentado, la puesta en escena propone la obra a un espectador activo, que tiene diferentes puntos de vista y que, para disfrutar del menú, deberá elegir (una situación que habla de la contemporaneidad de la obra).
Como recuerdos
“Los personajes históricos son como recuerdos, medio transparentes, que no ven a estos dos personajes reales que se mezclan en la historia y en algún momento hasta tienen la posibilidad de intervenir”, cuenta Panetta.
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