Una persona drogada pierde coordinación, experimenta un relajamiento muscular, ve afectada su capacidad de reacción, se le nubla la vista, no puede medir adecuadamente el tiempo y el espacio, y además puede ser más propenso a tomar riesgos extremos. El tiempo de espera desde que se consumió hasta que se puede conducir porque se disiparon los efectos depende mucho de la droga, de la cantidad consumida y del organismo de cada persona, aclararon los toxicólogos Alfredo Córdoba y Gustavo Marangoni, quienes dieron detalles sobre lo que genera, estando al volante, el consumo de cada droga.
Por sustancia
Alcohol:
Se suele subestimar los efectos de esta sustancia. El que bebe está convencido de que se encuentra bien para manejar. Pero se altera su motricidad fina y pierde el equilibrio. En las esquinas, en vez de parar, acelera. Esta sustancia permanece en la orina de tres a cinco días, de 10 a 12 horas en la sangre y hasta 90 días en el pelo
Cocaína:
Genera hiperactividad. Ante cualquier situación, como esquivar algo, el conductor no puede coordinar o tener reacciones suaves, sino que actúa abruptamente. Pegar el volantazo es una maniobra común de quien ha consumido cocaína. Los indicios de esta sustancia en la orina persisten de tres a cuatro días, de uno a dos en la sangre y hasta 90 días en el pelo.
MARIHUANA:
Se altera la percepción del tiempo y del espacio. No se miden bien las distancias. Pareciera que los vehículos se acercan lentamente cuando lo hacen rápido. También se altera la visión: la luz (no la alta) de otro vehículo los encandila y los lleva directamente a cerrar los ojos. Compromete seriamente la habilidad motora de la persona. Es una droga que al consumirla eleva muchísimo la probabilidad de que se produzca un accidente.
El THC (tetrahidrocannabinol), responsable de los efectos, permanece en la orina de siete días a un mes, casi dos semanas en la sangre y hasta 90 días en el pelo.
Pastillas tranquilizantes:
Provocan alteraciones en la conciencia, en la conducta y en el equilibrio, disminuyen el tono muscular. Causan relajación y somnolencia.
Los rastros de esta sustancia permanecen en la orina de dos a cuatro días, entre uno y dos en la sangre y hasta 90 días en el pelo.
Anfetaminas:
Tienen efecto estimulante y son altamente adictivas. Se usan para fines médicos pero es comercializada ilegalmente. Debido a que son estimulantes, estas pastillas aumentan la frecuencia cardíaca y la presión arterial pudiendo dañar la salud cardíaca permanentemente.
Las anfetaminas están en la orina de uno a tres días, aproximadamente 12 horas en la sangre y hasta 90 días en el pelo
Éxtasis:
Genera euforia, hiperquinesis, ansiedad. Cuando consume esta droga, el conductor tiene la visión borrosa y comportamiento descoordinado, desorganizado. Es típico que mientras van manejando se den vuelta a conversar o se distraigan con cualquier cosa. Tienen alucinaciones, crisis de pánico y hasta convulsiones.
El éxtasis permanece de tres a cuatro días en la orina, de uno a dos en la sangre y hasta 90 días en el pelo.