Atlético sumó un punto con sabor a poco

BUENOS AIRES, (Especial para LG Deportiva).- Mientras desde las calles cercanas al estadio de Banfield se escuchaban los balazos de goma de la policía bonaerense hacia la barra brava local, en una de las trifulcas habituales en el fútbol argentino, Ricardo Zielinski salió del vestuario visitante con el ánimo de esas personas que están de vacaciones y, cuando llegan a la playa, el cielo se les nubla.

O dicho de otro modo, el técnico tenía el humor a mitad de camino entre las sensaciones positivas de un empate conseguido de visitante (nada mal para los resultados anteriores fuera del Monumental) y las negativas de un partido en el que Atlético amagó con jugar bien pero no terminó de hacerlo. Está claro que el día en que haga el resumen de su trayectoria como técnico, Zielinski pasará por alto este 0 a 0 contra Banfield.

“Nos queda que sumamos, y nosotros tenemos que sumar siempre, también de visitante, que es importante. Además, van dos partidos con el arco en cero, y yo creo que los equipos se arman de atrás para adelante. Si mantenemos el arco cerrado, arriba siempre aparecerá una chance”, arrancó Zielinski su encuentro con los periodistas en tono neutro y debajo de dos ventiladores que ayudaban a disimular el calor del atardecer en el conurbano bonaerense. Según admitió, la clave estaba en generar espacios por afuera de la cancha. “Sabíamos que Banfield nos quitaría lugares por el centro. Fue mérito de ellos que se jugara el partido que finalmente se jugó. Nos llevaron a su territorio”. Sin embargo, cuando le plantearon que el local había jugado con mayoría de juveniles (el martes, en Ecuador, definirá su suerte en la Copa Libertadores), con una edad promedio de 22 años, Zielinski puso el freno en los elogios al rival: “se metieron todos atrás, fue lógico lo que hicieron; jugaron al contragolpe”.

Pero el arco en cero y el punto conseguido fuera de Tucumán tampoco llenaron de satisfacción al técnico. “No me voy conforme, queríamos ganar, pero no les pudimos entrar. A veces se dan estos partidos. Uno planifica algo que finalmente no se da en la cancha. Fue difícil de resolver, y la verdad es el que el empate estuvo bien”, cerró su análisis Zielinski, como si ya pensara en el partido del próximo lunes, ante San Martín de San Juan, en el Monumental.

Los jugadores coincidieron con el diagnóstico del entrenador. Rafael García, de buena actuación, dijo: “no nos vamos conformes porque queríamos ganar, pero rescato aspectos positivas. Defensivamente estuvimos sólidos, aunque es cierto que en el segundo tiempo nos faltó algo de dominio de la pelota”.

Rodrigo Aliendro se puso en el lugar de los hinchas. “Fue un partido feo y nunca nos sentimos cómodos”. Luis Rodríguez pareció dar una autocrítica. “Esto recién arranca, pero de estos partidos tan trabados siempre quedan cosas para corregir. Los rivales juegan y Banfield presentó un buen planteo. El técnico nos pedía que nos agrupáramos más, pero ellos hicieron bien sus cosas”, dijo “Pulguita”, mientras afuera ya habían dejado de sonar los disparos de la Policía, acaso el único motivo por el que este partido será recordado por quienes estuvieron en la cancha.