Tres nuevos ataques contra iglesias en una comuna de Santiago y en La Araucanía (sur) se registraron a la madrugada de hoy, cuando el el papa Francisco ya estaba a Chile
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Las iglesias destruidas fueron la capilla Santa Juana, en la comunidad de Alto Can Can, en Lagunillas (estaba recién construida), y la del sector de Río Negro, en Villa García. Los incendios comenzaron de manera simultánea y las causas están siendo investigadas. Los únicos indicios de cómo se originó el fuego son los restos de un lienzo que encontró en una de las parroquias un fiscal de Chile, Luis Arroyo, y por el olor a acelerante que se percibió en la otra.
Suman nueve las Iglesias católicas que han sido blanco de ataques incendiarios o explosivos desde la semana pasada en Chile.
En la Araucanía hay un despliegue de seguridad nunca antes visto, con más de 4.500 policías, para resguardar la misa que oficiará hoy ante 400.000 personas el Papa en el aeródromo Maquehue. Desde hace dos meses, varias comunidades mapuches se han manifestado contra la visita.
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El tercer ataque ocurrió en Puente Alto, Santiago, en la parroquia Madre de la Divina Providencia. Es el séptimo en el contexto de la gira de Francisco.
La puerta del templo fue quemada con un cóctel molotov, después de que un grupo de individuos rompiera el candado de la reja perimetral, según la prensa local.
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