BUENOS AIRES.- La defensa de Amado Boudou solicitó ayer que sea revocada la detención del ex vicepresidente y que si eso no ocurre se lo beneficie con el arresto domiciliario dado que no tiene condenas en su contra, va a ser papá y tiene un fuerte arraigo al país en el que vive.
El abogado Eduardo Durañona hizo la presentación ante el juez federal Ariel Lijo luego de que el magistrado levantara el secreto de sumario que regía hasta el mediodía de ayer sobre la causa por la que el ex funcionario kirchnerista se encuentra detenido.
El ex vicepresidente y ex funcionario kirchnerista se encuentra detenido en el marco de una causa en la que se lo investiga por enriquecimiento ilícito y presunto lavado de dinero en la que, según la Justicia, no pudo justificar el origen de parte de su dinero y sus bienes.
“Nuestro asistido carece de antecedentes penales y posee un domicilio estable donde convive con su pareja quien se encuentra en fecha próxima al parto de mellizos hijos”, sostuvo Durañona en su presentación.
“Todo lo expuesto demuestra que (Boudou) no solo posee arraigo suficiente en la República Argentina sino inclusive que su encierro podrá potencialmente afectar la salud de su concubina y de los niños por nacer”, agregó.
La defensa del ex vicepresidente pretende que, de ser rechazada la excarcelación como ya ocurrió antes, Boudou sea enviado a prisión domiciliaria, con pulsera electrónica, es decir que se le morigere la privación de la libertad.
Si el juez Lijo rechaza ambos pedidos, se espera que la defensa de Boudou apele el fallo ante la Cámara Federal que ya había sugerido la posibilidad de adoptar ?medidas cautelares menos lesivas? para los derechos del imputado.
Los jueces de la Sala I del tribunal de apelaciones, Jorge Ballestero y Leopoldo Bruglia, habían destacado hace un mes, en el fallo en el que confirmaron el rechazo de la excarcelación, la posible morigeración sugerida antes por el fiscal del caso Jorge Di Lello.
El ex vicepresidente fue detenido el 3 de noviembre pasado de manera preventiva en una causa por enriquecimiento ilícito y desde entonces se encuentra en el penal de Ezeiza. La decisión de la detención fue adoptada por el juez Lijo, quien sostuvo que, a pesar de estar a derecho, el imputado puede tener contactos que le permitan eludir a la Justicia.
Ese día, además de Boudou, también fue detenido su socio José María Núñez Carmona, porque el magistrado los acusa a ambos de haber encabezado una asociación ilícita destinada a cometer delitos relacionados con el lavado de dinero. Lijo acusó a Boudou por el supuesto lavado de activos por $ 4,2 millones y 995.000 dólares, en tres maniobras, una de ellas a través del blanqueo de capitales de la ley 26.476, en el 2009, al que ingresó Núñez Carmona.
Además, le imputó la compra con fondos sin justificar de un departamento. (Télam)