En su libro “Appetites: a cook book”, el cocinero estadounidense Anthony Bourdain (un personaje único, por cierto), brinda su receta del pavo que comen sus compatriotas el Día de Acción de Gracias, una fecha que bien podría asemejarse a la Navidad por los preparativos que demanda. Pero antes de hablar de los ingredientes y la preparación, el cocinero comienza por presentar su “estrategia de los tres días”. Se trata de un método relajado, “libre de violencia” y de locuras para llegar a la celebración en paz y amor.
El método consiste en tomarse tres días para hacer el dichoso pavo: uno para hacer las compras, otro para hacer la preparación previa, y el último para cocinarlo. De esa manera, llegará a la mesa sin que nadie quede rendido del cansancio y sin conflictos ni gritos en la casa, cuando todos quieren hacer todo a último momento.
Pues bien. Es un método muy inteligente, que se podría aplicar a todos los eventos que organizamos en casa y que ameritan grandes preparativos. Es solo cuestión de planificar la tarea. Y acá, en Argentina, sirve más que en ningún lado, porque además del factor estrés por los preparativos hay que sumarle el factor suba de precios durante las fechas clave.
Claro que, para combatir esa suba sorpresiva en los costos, con tres días no haríamos nada. Por eso, te proponemos y aconsejamos que hoy, 2 de diciembre, y a 20 días de Navidad, comiences a pensar en qué vas a cocinar, qué te tocará hacer y qué de todo eso podés ir comprando ya para elegir los mejores productos, al mejor precio posible y sin tener que zambullirte en la marea humana de los días previos a las Fiestas.
El objetivo de este método es comprar todo lo que se pueda congelar lo antes posible y dejar lo que necesariamente se utiliza fresco (como algunas, no todas las verduras) para comprar el día que toca cocinar.
Yo te avisé...
- El pan de miga para los sanguchitos se puede comprar ya y congelar sin problemas. Se descongela muy rápido.
- Los fiambres, sobre todo el jamón cocido y el queso para los sanguchitos o las picadas también se congela sin inconvenientes.
- El peceto, el matambre, el lomo... todas las carnes que vayas a usar las podés ir reservando a tu carnicero amigo para conseguir exactamente lo que querés y no pagar de más ante un posible aumento.
- El cerdo, el pavo, el pollo... encargalos cuanto antes y congelalos así como vienen. Retirarlos del freezer dos días antes de cocinarlos.
- Podés comprar un pernil de cerdo listo, filetearlo y congelarlo. También se puede meter al freezer completo, como lo deja el servicio de catering.
- Las bebidas. Si las ves a buen precio, compralas. Es posible que después salgan ofertas (sobre todo con las sidras o los espumantes) pero tambiés es posible que, justo cuando quieras comprar, esté alto el precio. No olvides darte una vuelta por las distribuidoras de bebidas.
- Consejo de oro. Si la reunión es al aire libre, comprá YA MISMO antorchas de citronela. Se agotan.