Si el hombre tuviera que presentarse a una entrevista laboral, en el apartado cualidades no faltarían la gambeta, el quiebre de cintura y la velocidad mental y física con la que puede desanudar problemas y resolver acertijos. David Barbona es el David de siempre en Atlético, opina, mientras ríe. Quizás ahora esté más viejo que antes, pero el tiempo es tiempo y bendice a todos por igual.
Lo cierto es que el David veterano de 22 años volvió a ser el explosivo de meses atrás, el mismo que voló junto con Atlético por esa rica historia llamada Copa Libertadores. Contra River, fue la copia fiel del que casi enmudece al estadio “Alianz Parque”, de Palmeiras, con un remate en el palo que podría haber puesto al “Decano” cerca de los octavos de final. En síntesis, David es más David que nunca, y en el equipo, agradecidos.
“Je, estoy bien. Gracias a Dios me salieron bien las cosas. Al grupo le salieron bien las cosas en los últimos 20-25 minutos del partido con River. Por eso empatamos y por eso casi ganamos”, reconoce el ex Chicago, hoy todo de Atlético, el Atlético que apostó por él en el mercado de pases pasado, sabiendo que junto con Rodrigo Aliendro y los caudillos Cristian Lucchetti y Luis Miguel Rodríguez, tiene que ser cimiento del éxito a construir en 25 de Mayo y Chile.
Barbona tuvo el partido soñado en otro Monumental ajeno al de “José Fierro”. “Me sentí muy bien. Aparte, enfrentar a rivales así te motiva el doble porque este tipo de partidos puede cambiarte todo a futuro”, explica el “Rayo”. Y cuando habla de cambio lo aplica al grupo, a que no hubiera sido lo mismo lamentar la derrota. Lo que Atlético generó en Núñez puede ser el siguiente paso hacia la consolidación de un plantel que necesita empezar a ganar en la Superliga.
Lo bueno es que Barbona fue el Barbona de la Libertadores. Fue el Barbona que contagió al resto, porque así llegaron los goles del “Decano”, a partir de su desequilibrio por la banda derecha y de hacer penar a Milton Casco, entre otros.
“Traté de aprovechar todos los espacios que había dentro de la cancha. Ellos también dejaban jugar un poco más, porque atacaban constantemente. Entonces los espacios aparecieron y nosotros tratamos de aprovecharlos. Por eso insisto en que el grupo hizo un gran esfuerzo”, reconoce a sus compañeros David, que no cree en eso de que la figura fue él y que por eso Atlético consiguió lo que consiguió. Juegan 11, no uno.
“Espero seguir por este camino. Tengo mucha confianza y debo aprovecharla”, asegura el Barbona que no deja de lado esa famosa cruz que significa la sequía de Atlético en la Superliga. El haber ganado tres partidos de los últimos 21, de los cuales él fue protagonista en su mayoría, es un dolor de cabeza real. “Nos cuesta y mucho. Y de visitante nos cuesta mucho más. Contando Vélez, que es por la Copa Argentina, se nos vienen tres partidos duros, como lo son Racing y Central, allá en Rosario. Tenemos que estar preparados, jugarlos como contra River. Si lo conseguimos, estoy seguro de que podremos sacar grandes resultados”.
Partidos son partidos, por eso David regresa la cinta y analiza nuevamente a Vélez, el enemigo inminente. “Y, es una final para nosotros. Estamos con el sueño de seguir avanzando en la Copa. Vélez viene muy bien, nos ha ganado, pero hay que meterle para adelante porque de avanzar en el torneo podremos acercarnos a la Libertadores”, sostiene quien tiene como compinche deportivo a Favio Álvarez, con quien se llevó como los dioses ante el “Millonario”. “Jugar con todos los compañeros es lindo, pero la diferencia es que con Favio ya nos conocemos de antes; nos conocemos bastante. Ese fue un punto extra. Igualmente, creo que hay un gran grupo de futbolistas, son todos muy buenos jugadores”, dice David, recién recuperado de un cuadro febril y con la energía necesaria como para aportar lo que Atlético necesita de él: vértigo, velocidad, quiebre de cintura y gambetas, el combo odiado por sus rivales. Los defensores de River pueden dar fe de ello.
El que cumple años, paga empanadas
Como ya es una tradición en el plantel de Atlético, el futbolista o integrante del cuerpo técnico que cumple años debe festejarlo como corresponde: agasajando al resto de sus compañeros con ricas empanadas tucumanas. El encargado de pedir el menú fue Cristian Lucchetti, el capitán que ayudó al volante central Dardo Miloc, que el domingo pasado había cumplido 27 años. Como parte del plantel se encontraba en Buenos Aires, recién ayer se realizó el ágape. En total, nueve docenas de empanadas llegaron al complejo de Ojo de Agua. Todos contentos.
Dos jornadas plenas de doble turno
En función de aprovechar los días de trabajo, el cuerpo técnico decidió marcar en su agenda laboral de la semana dos jornadas de doble turno. Una fue ayer y la otra será hoy. En ambos casos, además de seguir haciendo hincapié en la tenencia del balón y en la coordinación general del equipo, también habrá lugar para los ejercicios físicos y de recuperación.
Vélez, esa cuenta pendiente
Teniendo tan pegado el partido de Vélez con el de Racing, Ricardo Zielinski deberá definir si mantiene a los habituales titulares o bien decide cuidar a algunos y darle una chance a otros que habitualmente son suplentes, para enfrentar a la “V” el miércoles, en cancha de Unión, en Santa Fe. Atlético está urgido de sumar de a tres en la Superliga, pero también es cierto que Vélez es una cuenta pendiente y uno de los tres posible obstáculos a superar antes de volver a jugar la Libertadores 2018.
Un promo para los hinchas de la “V”
Desde Vélez se informó que pondrá a precio promocional para su hinchas un viaje ida y vuelta en ómnibus a Santa Fe con entrada incluida. El paquete tendrá un costo de $ 800. La CD quiere que el “Fortín” esté bien acompañado en la cancha del “Tatengue”.
No se puede perder tiempo
Desde la semana pasada se sabía que Atlético iba a viajar en un vuelo charter hacia Santa Fe. ¿El motivo? Cuidar el físico de los jugadores que luego deberán enfrentar a Racing, el sábado 28, en 25 de Mayo y Chile.