Partes del laboratorio espacial chino "Tiangong 1", del que se perdió el control en 2016, caerán pronto a la Tierra, advirtieron los expertos.
"Una gran parte del laboratorio se desintegrará en la atmósfera, pero algunas partes especialmente grandes, como tanques de combustible, podrían alcanzar la superficie terrestre", dijo hoy a a la agencia DPA el experto en el espacio Morris Jones.
Aunque es imposible predecir dónde caerán los fragmentos, "el riesgo de que alcancen a personas o casas es bastante bajo", aseguró el australiano.
El septiembre del año pasado se supo que China ya no podía controlar el "Palacio Celestial" de 8,5 toneladas y que tras seis años en el espacio y numerosos experimentos, caería a la Tierra de forma descontrolada.
Según la agencia espacial del país, el laboratorio espacial gira alrededor de la Tierra cada vez en una órbita más baja y caerá como muy tarde en abril de 2018, informó la Dpa.
No se trata ni mucho menos de la primera vez que basura espacial colisiona con la Tierra. El artefacto más grande hasta ahora fue la estación rusa "Saliut 7", cuyos fragmentos cayeron en 1991 en Argentina sin alcanzar a ninguna persona. Además, Estados Unidos no consiguió en 1979 hacer que su laboratorio "Skylab" cayese sobre Sudáfrica y finalmente se estrelló en Australia.
"Esperamos que en el futuro se preste más atención a los satélites y a las estaciones espaciales fuera de servicio", dijo el experto estadounidense Leonard David. "Hay que pensar en reciclar directamente en el espacio la basura espacial, en lugar de dejar que caiga a la Tierra, añadió.
China lanzó en septiembre de 2011 el "Tiangong 1", donde se realizaron a los largo de los años seis maniobras de acoplamiento con naves chinas de la serie "Shenzhou".
Desde el año pasado ya orbita alrededor de la Tierra el sucesor de "Tiangong 1". En el nuevo laboratorio espacial pueden vivir dos astronautas durante más tiempo que en el modelo anterior. Además "Tiangong 2" tiene más capacidad de almacenaje y puede repostar.
Estos laboratorios sirven para construir y poner en marcha una estación espacial china propia, que estará lista en 2022. Si la Estación Espacial Internacional (ISS) deja de funcionar en 2024, como está previsto, será China el único país con una estación permanente en el espacio. Sin embargo, con sus 60 toneladas será mucho más pequeña que la ISS, de 240 toneladas.
China planea además realizar en los próximos años varios vuelos a la Luna y una misión a Marte.