Dos guardiacárceles quedaron detenidos por la muerte del preso Rubén Alejandro Medina, quien murió en la Navidad de 2015. Según la hipótesis que baraja la fiscala Adriana Giannonni, Medina habría sido estrangulado por Juan Lucas Rodríguez y Héctor Luis Morales en el fondo de la comisaría séptima luego de un intento de motín que fue sofocado por el Grupo Cero y por el Cuerpo de Infantería. Al preso, que murió tres horas después, le encontraron una hoja de afeitar en la boca. El resto de los detenidos declaró que los guardiacárceles esa noche les habían vendido drogas y alcohol.
Medina estaba detenido por un robo en el que habría fallecido su cómplice
Rubén Alejandro Medina murió tres semanas después de haberse entregado a la Policía por un robo agravado. El joven de 23 años, habría participado en un violento atraco que se había producido en octubre de 2015. Según los pesquisas, el fallecido era acompañante de un motociclista que le habría intentado robar la motocicleta a un policía en la esquina de avenida Benjamín Aráoz y Papa Francisco. El uniformado, al verse acorralado por los asaltantes, se identificó como integrante de la fuerza e hirió mortalmente a Omar Exequiel Rodríguez, de 22 años, mientras su cómplice huía. Medina se presentó el 1 de diciembre ante la fiscala Adriana Reynoso Cuello, que pidió que un juez de Instrucción le dictara la prisión preventiva por este hecho.
Los guardiacárceles fueron separados del cargo y se inició una investigación
El agente Juan Lucas Aguirre y el sargento Héctor Luis Morales seguían prestando servicio. Sin embargo, cuando las autoridades del Servicio Penitenciario se enteraron de la imputación, los separaron hasta tanto se conozcan más detalles de la investigación que viene desarrollando la fiscala Adriana Giannoni. Paralelamente, según informaron fuentes del área de Seguridad, se inició una investigación interna para determinar la responsabilidad de los sospechosos. Por otra parte, trascendió que en la Policía también comenzó a investigar el caso. Estarían indagando si algún uniformado tuvo algún tipo de participación en el crimen o si trabajaban en conjunto con los acusados para permitir el ingreso de bebidas alcohólicas y droga a la seccional.
“Ellos contaron cómo fueron los hechos y que los responsables son los policías”
Juan Luis Hermosa, defensor de Juan Lucas Rodríguez y Héctor Luis Morales, confirmó a LA GACETA que ambos rechazaron la acusación que se les realizó. “Ambos cumplían funciones de guardiacárceles, pero no tuvieron nada que ver con la muerte de ese joven. Ellos, esa noche, intervinieron para las que cosas no fueron más graves”, comentó el profesional. El abogado agregó: “es imposible que ellos hayan hecho eso porque siempre se quedaron en la zona de los arrestos. Los dos contaron cómo fueron los hechos y dijeron que la responsabilidad de cuidar a la víctima era de los policías. Y es imposible que ellos hayan vendido alcohol o drogas porque el control de lo que ingresaba a la zona de arresto era de la guardia”, concluyó.